Eyeliner y pintalabios: cambia tu look con sólo dos productos
Con estos dos básicos de tu neceser lograrás un match perfecto. Encuentra tu estilo en las siguientes propuestas, a cuál más sugerente y rejuvenecedora
Transforma tu estilo con tan solo dos productos: eyeliner y pintalabios. Descubre cómo resaltar tus rasgos con un delineado perfecto y unos labios vibrantes. Cambia tu look de manera rápida y efectiva, potenciando tu belleza en un par de pasos.
Pícaro y seductor
El rosa se considera sinónimo de inocencia y de maquillajes naturales y aniñados, pero hay tonos y tonos, y este frambuesa profundo da a tu boca un aspecto tentador. Para copiar este «look» y añadir un plus de volumen, perfila los labios por fuera de su frontera natural con un lápiz del mismo color.
Mirada intensa. El tono granate puede parecerte algo arriesgado para el eyeliner, pero a la vista está que funciona y logra dar calidez a la mirada. Y, además, queda de fábula con ojos marrones y verdes
Un clásico que siempre triunfa
Al más puro estilo Rita Hayworth, los labios en rojo nunca pasan de moda y si son en clave burdeos, como en este look, arrasan.
Sólo para tus ojos. Los ojos se maquillan con un delineado cat eye en su versión clásica –simplemente alargando y elevando un poco el rabillo–. Para lograr un trazo perfecto, el eyeliner líquido es ideal, aunque requiere cierta práctica. Te resultará más fácil de usar el lápiz y tendrás un acabado 10 si eliges uno con la mina cremosa y bien afilada.
Pon color a tu mirada
Azul eléctrico, brilli brilli... este delineado es un guiño a los looks ochenteros. La línea superior en azul, sobre un «cat eye» clásico en negro, se alarga desde un poco antes del ángulo interior del lagrimal hasta el rabillo del ojo y más allá, elevando y rasgando la mirada hasta convertirla en casi felina. ¡Magia!: tu mirada se ha duplicado.
Un par de truquitos más. Los dos delineados deben ser muy finos –al ser doble enseguida podría quedar muy ancho y haría que el ojo pareciese más pequeño–y deben quedar uno justo encima del otro, sin huecos. Completa el «look» con un toque de «gloss» en los labios que, además de disimular pequeñas arruguitas, hará que parezcan más gruesos y sensuales.
Los 90 vuelven... renovados
Los labios chocolate sutilmente maquillados con un efecto satinado, ni muy mate ni muy brillante, recuperan una tendencia de los noventa. Pon la guinda a esta propuesta resaltando los ojos y potenciando la mirada con un fino delineado negro superior, bien pegado al nacimiento de las pestañas para que se vean más densas. Así enmarcarás la mirada dándole más profundidad. Un toque de lápiz nude o blanco en la línea de agua del párpado inferior es un truco infalible para agrandar el ojo.
Labios perfilados. Si quieres añadir un poco más de sofisticación a este look, perfila tus labios. Ese gesto tan típico de los 90 vuelve a ser tendencia esta temporada y te ayuda a corregir a tu antojo su forma. Eso sí, hazlo de manera sutil para que se integre con el color del labial. ¡Ganarán grosor!
Efecto lifting
El delineado inverso da la vuelta, literalmente, a la clásica línea en el párpado superior y así consigue elevar el ojo de forma inmediata y agrandar la mirada. Además, es mucho más sencillo de dibujar.
Más fácil todavía. Traza una línea ascendente en el párpado inferior, desde el lagrimal hasta el otro extremo y un poco más siguiendo la curvatura del ojo. Emplea un delineador verde metalizado o, en su defecto, sombra de ojos en polvo (aplícala con un pincel fino con esponja y difumina para el acabado de la imagen). A continuación, dibuja una fina línea en negro en el párpado superior y alarga casi hasta la ceja, por encima del trazo verde, de forma que ambos delineados queden conectados. Para acabar, un labial nude en tono melocotón o coral tenue será muy favorecedor, disimulará las arruguitas en esa zona y no competirá con tu mirada, la protagonista de esta impactante propuesta.