Brad, de 53 años, ha hablado por primera vez a «GQ Style» de su lucha contra el alcohol.
Los últimos meses no deben de haber sido fáciles para Brad. En su rostro se puede ver reflejada la lucha que mantiene contra su adicción al alcohol, de la que ha hablado por primera vez desde su separación de Angelina Jolie el pasado mes de septiembre.
El actor está siguiendo terapia psicológica y ha reconocido que la bebida ha sido un problema en su vida. Si quieres saber en qué momento de su vida se encuentra, no te pierdas el reportaje de la revista Pronto.