Alcatraz es, ahora, un museo y en la celda de uno de los fugados puede verse la cabeza de muñeco que dejó en la cama para retrasar que los guardias descubrieran su huida.
El penal de Alcatraz, situado en un islote inexpugnable de la bahía de San Francisco, pasaba por ser la prisión más segura de EEUU hasta que, el 11 de junio de 1962, tres reclusos se escaparon en una fuga rocambolesca. Nunca más volvieron a ser vistos. Oficialmente, fueron dados por desaparecidos y se creyó que habían muerto, pero ahora se ha sabido de la existencia de una carta en la que se asegura que sobrevivieron. No te pierdas esta semana, en Pronto, el reportaje sobre este apasionante caso.