Alberto de Mónaco: su fortuna en peligro tras despedir a su gestor
El soberano tiene que declarar por el supuesto “despido abusivo” de Claude Palmero
Alberto de Mónaco está muy preocupado por su economía.
El soberano se enfrenta a algo inusual en la historia de su país. Y es que Alberto de Mónaco tendrá que declarar ante la justicia europea por el supuesto “despido abusivo” de Claude Palmero, el que durante décadas fue gestor de la enorme fortuna del príncipe y de la familia Grimaldi, y que conoce (y seguramente tiene documentos) de todos los secretos de su patrimonio.
Administrador de la fortuna de los Grimaldi desde hace 30 años
El excontable de Alberto de Mónaco, Claude Palmero.
Palmero, antiguo compañero del príncipe, lleva administrando la enorme fortuna de los Grimaldi desde hace más de tres décadas, por lo que sabe de primera mano (y tiene documentos) todo lo que han hecho y hacen con su dinero desde Alberto, hasta sus hermanas, Estefanía y Carolina. Una información que podría llegar a utilizar si se diera el caso.
Parte de la Familia real de Mónaco, el día de su fiesta nacional.
Todo el conflicto comenzó cuando, a finales del pasado mes de julio, Alberto de Mónaco despidió con "efecto inmediato" a Palmero que, no contento con la decisión, quiso apelarla ante la justicia de Mónaco, pero aquello no sirvió de absolutamente nada.
"En Mónaco, todo el sistema judicial está al servicio del príncipe, que nombra y destituye a quien quiere, para mejor defender sus intereses personales. Algo escandaloso. Imposible defenderse contra las decisiones autoritarias y arbitrarias del príncipe. De ahí nuestro recurso al Tribunal Europeo de los Derechos del hombre. Más allá de un caso personal, se trata de un caso de escuela. El mundo debe conocer esa otra cara de Mónaco. Claude Palmero merece que se haga justicia", aseguró su abogado, Pierre-Olivier Sur, dispuesto a todo para sacar a la luz esta injusta situación.
Alberto con su expareja y su hijo en común.
A la espera de que se lleva cabo este delicado juicio, se ha sabido que este despido guarda relación con los intereses familiares de Patrice Pastor, uno de los magnates más importantes de Mónaco/Montecarlo, que se quejó a Alberto de algunas "prácticas mafiosas" que practicaba Claude Palmero, según informa el diario 'ABC'.
Ante aquello, el Príncipe decidió despedirle, sin pensar en todas las consecuencias que podría acarrear.