Carlota y Dimitri se casaron en palacio.
La hija mediana de la princesa Carolina de Mónaco siempre ha llevado una vida poco convencional y, por eso mismo, su boda no podía ser una más. Sin la pompa ni el boato propios de su principesca familia, pero sí con grandes dosis de glamur y diversión, y rodeados de sus familiares y amigos más cercanos, Carlota Casiraghi, de 32 años, y su novio, Dimitri Rassam, de 37, productor cinematográfico e hijo de Carole Bouquet, se dieron un discretísimo «sí, quiero» en los Salones de Estado del palacio de Mónaco.
Luego lo celebraron invitando a sus amigos a una recepción a base de pizza y helado; a una espectacular fiesta en La Vigie, el palacio monegasco que perteneció a Karl Lagerfeld, el desaparecido íntimo amigo de Carolina; y a un reparador almuerzo al día siguiente en el Yatch Club.
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