El catalán, ayudando a confeccionar una de sus premiadas –y solidarias– lámparas
Curro Claret, de 49 años, es un conocido diseñador industrial de Barcelona que trabaja para ayudar a los demás reciclando, no sólo objetos, sino también personas. Ha creado bancos que, por el día, sirven para sentarse en las iglesias y, por la noche, se convierten en camas para personas sin hogar. Y coordina la elaboración de unas lámparas con cordones de zapatos Camper que confeccionan en la Fundación Arrels, dedicada a la asistencia de personas sin recursos. Te lo contamos en tu revista Pronto.