Entrevista a Los Chichos: "Nos vamos con orgullo y la cabeza bien alta"
Los Chichos han recibido un premio Ondas, un galardón más que merecido tras 50 años de profesión. Hablamos con ellos en Pronto:

Los Chichos.
El Ondas a “Los Chichos” reconoce una trayectoria plagada de éxitos en el que todos recordamos canciones como “Ni más ni menos”, “Quiero ser libre” y “Mujer cruel”.
Hablamos con Emilio, alma mater del grupo, quien nos dice que “estamos orgullosos de este premio, la verdad es que tenemos derecho, después de medio siglo cantando, a que nos honren de esta forma. Nos viene muy bien este galardón. Es un homenaje muy bonito”.

PRONTO.: Cuando echas la vista atrás, ¿qué mejores recuerdos te vienen a la mente?
EMILIO.: El reconocimiento del público, sentirnos tan queridos por la gente. Todavía, cuando nos subimos a un escenario lo damos todos, nos sentimos como fieras…
P.: ¿De qué presumís?
E.: De ser personas sencillas y normales. Y de que nuestras canciones hayan llegado a varias generaciones de españoles. Siempre caemos bien a todo el mundo.
"Nos retiramos, pero actuamos de vez en cuando"

P.: ¿Por qué os retiráis?
E.: Porque ha llegado la hora de vivir con más tranquilidad, dedicarnos a la familia, aunque es evidente que el artista ama los escenarios y actuaremos de vez en cuando en conciertos benéficos o muy especiales. Si me respeta la salud veré que puedo hacer… Me siento un chaval por fuera, pero por dentro ya tengo mis achaques.
P.: Hacerlo en consonancia con tu hermano y tu hijo. Los tres formáis el grupo.
E.: Claro, estamos muy unidos. Nuestra familia es una piña. Ahora, nuestras mujeres están contentas con la retirada porque pasaremos más tiempo en casa.

P.: Qué pena que por el camino se quedara El Jero…
E.: Sí, murió cuando el grupo pasaba por una etapa muy buena, sentimos muchísimo su fallecimiento, pero no podíamos quedarnos estancados. La vida sigue.
P.: ¿Os vais dejando sin cumplir alguna asignatura pendiente?
E.: Lo único que nos falta es haber subido a la Luna, ja, ja, ja, es que hemos hecho de todo. Nos vamos con orgullo y la cabeza bien alta.