Iker Jiménez cuenta lo que no soporta en sus compañeros de trabajo
El presentador de ‘Cuarto Milenio’ carga contra la falta de esfuerzo y disciplina en parte de su equipo en su última newsletter personal

Iker Jiménez en una imagen de archivo.
El periodista y presentador Iker Jiménez ha sorprendido con unas declaraciones muy directas sobre el trabajo en equipo. En su última newsletter personal, enviada a sus suscriptores, el presentador de programas como 'Cuarto Milenio' y 'Horizonte' compartió una reflexión cargada de autocrítica, pero también de frustración hacia algunos de sus colaboradores.
"Hoy he tenido bronca con no sé cuántas personas en la cadena de televisión. No pasa nada. Esto es la selva. Así debe ser", comenzaba escribiendo Jiménez, en un texto en el que reconoce su carácter exigente y su incomodidad ante la falta de implicación profesional.
El comunicador, que lleva más de dos décadas al frente de formatos de investigación y divulgación, confesó que sus conflictos laborales suelen deberse siempre al mismo motivo: la falta de cultura del esfuerzo.
Iker Jiménez carga duramente contra sus trabajadores: "No soporto la gente que se escaquea"
En su mensaje, Iker Jiménez explicó que se considera una persona entregada a su trabajo y que esa actitud le lleva a chocar con quienes no comparten el mismo nivel de compromiso. "No creo que alguien pueda decir que yo no trabajo. Otras cosas no sé. Pero que no doy mi 100% cuando trabajo… eso no", escribió.
"Cuando te acostumbras a eso, quien da el 50% o el 60% te parece poco. Y chocas, inevitablemente. Aunque sea de los tuyos. No soporto la gente que toma atajos, que se escaquea. Y abunda. En todos los ámbitos".
Jiménez también reconoció que se ha vuelto "maniático" con el paso de los años y que pequeños descuidos pueden arruinar el trabajo de todo un equipo: "A veces un trabajo de mucho esfuerzo sale peor por una sola persona. Por alguien que da a un botón, sube o baja un micro, lanza una imagen... El trabajo de mucha gente entregada. Y entonces se me nubla hasta la vista. Me entra una furia. No lo aguanto".
Un perfeccionista confeso
El presentador también admitió que su nivel de autoexigencia le lleva a analizar incluso sus propios errores: "Hoy mismo creo que he hecho una elección mala en el tempo del programa, en la estructura. Y es culpa mía. Qué rabia. Reconozco que no soporto un ruido, una bolsa, mirar un móvil, que no se preste atención. Eso cuando se está en vivo o grabando".
Estas palabras refuerzan la imagen de perfeccionista riguroso que Iker Jiménez ha proyectado a lo largo de su carrera. En julio, ya había desvelado en una entrevista en 'Cuarto Milenio' que había tenido que prescindir de varios trabajadores por “faltas de respeto al clima” de trabajo, insistiendo en la necesidad de mantener silencio, concentración y respeto durante las grabaciones.

Iker Jiménez.
Un estilo de trabajo muy exigente
Aunque algunos de sus seguidores interpretan sus palabras como una reprimenda a su equipo, otros las han leído como una defensa de la profesionalidad y la excelencia. En su texto, Jiménez subraya la importancia de crear una atmósfera de concentración casi ritual, que permita al espectador conectar con el mensaje del programa.
Y es que el periodista siempre ha sido conocido por su carácter apasionado y su compromiso con un tipo de televisión muy personal, donde —según sus propias palabras— "solo hay espacio para los que lo dan todo".