Hablamos con Kike Quintana: "Estoy orgulloso de ser sobrino de Ana Rosa"

Ni va de “sobrino de…” ni lo pretende. Kike Quintana se abre camino en el mundo de la televisión por méritos propios, demostrando, eso sí, que su carácter fuerte y directo le viene en los genes familiares. Su tía, Ana Rosa Quintana, no tiene pelos en la lengua a la hora de criticar lo que cree necesario. Y Kike, en este sentido, no se pone límites. Desde 'TardeAR' se está convirtiendo en uno de los colaboradores más incisivos de la televisión. Un descubrimiento total.

PRONTO: Te estás convirtiendo en un personaje muy popular. ¿La fama te cambia?

KIKE QUINTANA.: No sé si soy muy conocido, pero bien es verdad que a veces me para gente por la calle y me muestra mucho cariño. Pero no he cambiado, llevo una vida normal, trabajo, hago ejercicio, disfruto con mi mujer y mi perrito.

P.: Un hombre grande con un caniche pequeño…

K.Q.: Si, ja, ja, ja. Parecemos Obelix e Idefix. Pero ahora que he adelgazado, estamos más armoniosos.

P.: ¿En tu vida personal eres tan crítico como en la tele?

K.Q.: Procuro ser igual en los dos campos, porque, si no lo fuera, mi imagen acabaría desgastándose. Uno de mis puntos fuertes es la naturalidad, en mí no se ve una actitud impostada o forzada. El Kike real no tiene un personaje detrás. Soy el mismo delante que detrás de las cámaras.

P.: Pues lo que debe sufrir tu esposa.

K.Q.: Mi mujer es un ser maravilloso, me aguanta y me ama.

P.: No tenéis hijos…

K.Q.: Todavía no, pero espero ser padre algún día.

P.: Ya tienes cuarenta y un años, como sigas esperando los niños te van a llamar “yayo”.

K.Q.: Nunca se sabe… yo estoy abierto a aumentar la familia.

P.: ¿En la tele no le ponen límites a tu descaro verbal?

K.Q.: Hasta la fecha no he tenido ese problema. Es más, me piden que sea yo… sin cortapisas ni límites. Nadir me censura nada.

P.: Dicen que tienes un poco de mala baba.

K.Q.: ¿Quién dice eso? Tengo buen carácter. Bueno, algo de humor ácido si, que dicen que es de personas inteligentes.

P.: ¿Nunca has ido de sobrino de…?

K.Q.: No, pero entiendo que haya gente que lo piense. Estoy orgulloso de ser sobrino de Ana Rosa, es como una segunda madre para mi, nos entendemos perfectamente. Y mi madre biológica lo entiende perfectamente. A mi madre la quiero muchísimo, y mi tía es un ejemplo y lo más grande. Algunos dicen que soy el sobrino respondón. Pero todo lo que digo en un plató lo digo sin ninguna maldad.

P.: Con Sonsoles Onega te pasaste un poco… ¿Has hecho las paces con ella?

K.Q.: No tendría ningún reparo en hacerlas.

P.: Eres un apasionado del fútbol.

K.Q.: Lo soy, incluso he jugado en un equipo mucho tiempo, en el Spartac de Manoteras. Y soy, al igual que mi tía, seguidor del Atlético de Madrid.

P.: Tienes otra gran afición.

K.Q.: Las motos, soy muy motero.

P.: Y te quitaron un vicio alimenticio cuando te pusiste a régimen.

K.Q.: Ja, ja, ja, las palmeras de chocolate, que me encantan. Pero los fines de semana me gusta estar tranquilo en casa, viendo una película con mi mujer, y no me privo de algún postre con chocolate. Eso sí, ahora cuido mucho más mi alimentación. Ya he perdido quince kilos.

P.: Tú tita Ana Rosa asegura que te tiene muy bien alimentado…

K.Q.: Es que cocina muy bien. La ensaladilla rusa y las croquetas le salen fantásticas.

P.: ¿En tu matrimonio no hay discusiones, prima la armonía?

K.Q.: Es que los dos trabajamos tanto que no tenemos tiempo para discutir, es fantástico, así estaremos toda la vida juntos

P.: ¿Echas de menos las noches de juerga con los amigos?

K.Q.: No, porque siempre he sido más diurno que nocturno.

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