Lolita Flores y su entrevista más íntima: "Vivo de alquiler porque vendí mi piso para pagar a Hacienda"
La artista se ha sincerado sobre su complicada relación con Hacienda, su actual estilo de vida y cómo afronta el amor a los 67 años
Lolita Flores en una imagen de archivo.
Lolita Flores se ha abierto en canal sobre aspectos muy personales de su vida en una entrevista concedida a Julia Otero en el programa 'Julia en la Onda'. La cantante y actriz, actualmente jurado en 'Tu cara me suena' y en plena promoción de 'Poncia', su nueva obra inspirada en 'La casa de Bernarda Alba', sorprendió a los oyentes al revelar que vive de alquiler.
"Me compré un piso y lo vendí para pagar a Hacienda cuando estaba el señor Montoro. Me dan ganas de pedirle los dos millones que me quitó en ocho años", confesó.
Julia Otero y Lolita Flores.
Lolita Flores: su deuda con Hacienda
La hija mayor de Lola Flores explicó que durante el mandato de Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda entre 2011 y 2018, tuvo que hacer frente a múltiples inspecciones fiscales. "Por ingresos pagaba, pero luego se me hacían inspecciones, como a muchos artistas de este país. De reírme nada, no me hace ninguna gracia", declaró con firmeza.
Actualmente, asegura estar al día con el fisco: "Gracias a Dios ahora estoy bien con Hacienda, no debo nada". Eso sí, diferenció entre la obligación de pagar impuestos y los abusos que, en su opinión, muchos artistas sufrieron: "Una cosa es pagar impuestos y otra que te hagan inspecciones sin venir a cuento y que luego ese dinero no vaya a los servicios públicos".
Su vida independiente y su visión del amor
Más allá de sus problemas económicos pasados, la artista también habló de su familia y de su posicionamiento en temas sociales, mostrando una vez más su carácter directo y sin filtros
En lo sentimental, a sus 67 años, Lolita se declara feliz con su independencia personal. "Tengo mi cama para mí sola, mi tele para mí sola, mi cenicero para mí sola", dijo con humor. Aunque no cierra las puertas al amor, tiene claro que quiere mantener su espacio: "Un hombre de 45 o 50 años me vendría muy bien, pero él en su casa y yo en la mía".