Marta Peñate y Tony Spina, destrozados por la pérdida de su bebé: sus duras palabras
La colaboradora relata con lágrimas en los ojos uno de los momentos más duros de su vida tras perder el bebé que esperaba con Tony Spina

Marta Peñate y Tony Spina en 'De Viernes'
El pasado martes, Marta Peñate vivió un auténtico infierno. Acudió a urgencias por un pequeño sangrado, sin imaginar que esa visita acabaría en una de las noticias más devastadoras: el bebé que esperaba junto a su pareja, Tony Spina, ya no tenía latido. Así lo ha contado entre lágrimas en el programa ¡De viernes!, donde ha relatado por primera vez su experiencia con un dolor casi imposible de describir.
“Pensé que todo iba bien. Ya habíamos oído el latido dos veces… Pero cuando la ginecóloga preguntó si había latido antes, supe que algo iba mal. Sentí cómo algo se me rompía por dentro”, confesó completamente rota.
Marta Peñate: “me arrepiento de haberlo contado públicamente”
Marta ha reconocido que haber hecho público su embarazo fue, en sus palabras, un error: “Esta vez no vengo a ayudar a otras mujeres, vengo a ayudarme a mí. Hacerlo público ha sido una losa, porque ahora me siento obligada a contarlo todo, y no quiero que me miren con pena”.

Marta Peñate desolada tras perder a su bebé
Pese a los consejos de su entorno para que no anunciara la noticia tan pronto, Marta se dejó llevar por la ilusión, y ahora asegura sentir “vergüenza” al enfrentarse a la gente que conoce su historia.
Tony Spina, su mayor apoyo en medio del dolor
Tony ha sido un pilar fundamental durante este duro proceso. En el mismo programa, visiblemente afectado, explicó que su prioridad ahora es el bienestar de Marta: “Mi sueño era ser padre, sí, pero no me compensa verla sufrir así. Mi único deseo es verla feliz, no importa nada más”.

Marta Peñate y Tony Spina
La pareja, pese al dolor, no descarta volver a intentarlo. Marta ha confirmado que aún le quedan dos embriones congelados y que cuando esté lista, lo volverán a intentar, pero con una condición: “Esta vez lo haremos en la intimidad. No quiero volver a pasar por esto públicamente”.
Marta ha querido cerrar este capítulo dando la cara y pidiendo respeto: “No quiero que me pregunten más en la calle ni en los photocalls. Estoy triste, sí, pero no voy a dejar que esto me destruya. Soy una luchadora y tengo una vida que merece la pena vivir”.