Se descubre el negocio que Miguel Carcaño, asesino de Marta del Castillo, tenía dentro de la cárcel
En 'Espejo público' han hablado del negocio paralelo e ilegal que tenía Miguel Carcaño en la prisión de Herrera de la Mancha
Miguel Carcaño, durante su detención en 2013.
Desde que condenado por el asesinato de Marta del Castillo y hasta su traslado al Centro Penitenciario Málaga II, en Archidona, el pasado mes de septiembre tras hallar en su celda dispositivos electrónicos ilegales (una tablet, un teléfono móvil y una conexión USB con acceso a internet), Miguel Carcaño ha cumplido condena en la cárcel de Herrera de la Mancha, en Ciudad Real.
Hace poco conocíamos que el sevillano recibía favores en la cárcel por su relación con una funcionaria, y ahora, un excompañero de prisión, ya libre, ha hablado sobre el negocio ilegal que Carcaño tenía en su celda, en una de las primeras cárceles de máxima seguridad construidas en España.
Un excompañero de Miguel Carcaño habla en 'Espejo público'.
En su testimonio para 'Espejo público', este exconvicto, que coincidió en la misma cárcel con otros terribles criminales como José Bretón, condenado por el asesinato de sus hijos Ruth y José, o Tony King, que cumple condena por las muertes de Rocío Wanninkof y Sonia Carabantes tras una primera (e injusta) sentencia contra Dolores Vázquez; ha hablado del negocio que Miguel Carcaño tenía en Herrera de la Mancha.
El negocio ilegal de Miguel Carcaño en la cárcel de Herrera de la Mancha
Un excompañero de Miguel Carcaño habla en 'Espejo público'.
Hablando de lo fácil que es conseguir en prisión cualquier tipo de objeto, incluidas armas, a cambio de un altísimo precio (un teléfono móvil que fuera puede costar 15 euros, dentro pueden pedir por él 300), este hombre que coincidió dos años en Herrera de la Mancha con Miguel Carcaño habla de que "Todo ahí dentro te puede costar el doble o el triple".
Y, precisamente, era el asesino de Marta del Castillo quien tenía "un economato en su habitación".
Un excompañero de Miguel Carcaño habla en 'Espejo público'.
Este hombre fue testigo en primera persona de los tejemanejes de Carcaño en prisión: "Tú le pedías algo, entonces cuando bajabas al patio, él te lo daba", explica, señalando que entre rejas "hay un negocio" aunque "van a decir que no".
"En la cárcel cuesta vivir más que en la calle", apunta.