Richard Gere y su mujer Alejandra: su vídeo más romántico
Richard y Alejandra Gere deslumbran en la alfombra roja del Festival de Cine de Zúrich con un romántico posado lleno de complicidad

Richard y Alejandra Gere @alejandragere
Richard Gere y su mujer, Alejandra, han derrochado amor y elegancia en el Festival de Cine de Zúrich, donde una vez más han robado todo el protagonismo en la alfombra roja. La pareja, que lleva años junta, sigue mostrando una conexión tan profunda como el primer día.
Alejandra y Richard Gere: Derroche de amor en el Festival de cine de Zúrich

Richard y Alejandra han paseado su amor por la alfombre roja de el Festival de cine de Zúrich.
Alejandra, radiante como siempre, lució un espectacular vestido blanco, deslumbrando a los asistentes con su belleza. Richard, por su parte, optó por un elegante traje negro, confirmando que, a sus 74 años, sigue siendo un icono de estilo masculino.
La complicidad entre ambos era evidente en cada gesto, sonrisa y mirada, lo que ha provocado una ola de ternura entre sus seguidores, quienes han comentado en redes sociales lo enamorados que se ven tras tantos años juntos.
La historia de película de Richard y Alejandra Gere

Richard Gere y Alejandra en una alfombra roja.
La historia de amor entre Richard y Alejandra es digna de un guion cinematográfico. La gallega y el actor de "Pretty Woman" se conocieron en el precioso pueblo de Positano, en Italia, donde la española trabajaba en un hotel. Fue un encuentro que marcó el inicio de una relación que ha superado fronteras y edades. Desde entonces, no han dejado de demostrarse su amor, casándose en 2018 y formando una hermosa familia con dos hijos, consolidando una vida juntos y felices.
Richard y Alejandra Gere siguen estando tan enamorados como siempre

Los 34 años de diferencia en la edad nunca han entorpecido su romance, que sigue tras seis años de casados.
A pesar de valorar su privacidad, Alejandra siempre encuentra tiempo para compartir momentos tan especiales como este en sus redes sociales, demostrando que la conexión que comparte con su marido sigue intacta.