Ana Boyer y Verdasco, de vacaciones en Marbella con sus peques
El matrimonio ha disfrutado de una escapada de lujo con Miguel y Mateo
Ana Boyer y Fernando Verdasco se casaron en 2017.
Se nota que la hija de Isabel Preysler y Miguel Boyer, Ana, que actualmente reside en Doha (Catar), echa de menos nuestro país. Por eso, siempre que puede, regresa para disfrutar aquí de todo lo que no encuentra en la ciudad árabe.
En esta ocasión, la joven ha decidido poner rumbo a Marbella con su marido, Fernando Verdasco, y sus hijos, Miguel y Mateo. Y nada mejor que la Costa del Sol para pasar unos días en familia y a todo lujo, y es que tan sólo el bañador que ella lució, en esa jornada playera, cuesta la friolera de ¡460 euros!
Vacaciones en familia tras la boda de su hermana Tamara
Tras darlo todo en la boda de Tamara Falco e Íñigo Onieva, en la que sus hijos fueron también grandes protagonistas, la influencer y el deportista se relajaron mucho junto a sus pequeños.
Ana, de 34 años, es una it girl como su hermana y su madre, y cuida hasta el último detalle de todos sus looks, apareciendo siempre impecable.
Así es el lujoso hotel en el que se han alojado ¿gratis?
Ana es embajadora de marca de un mítico alojamiento de Marbella reconvertido en un hotel de 5 estrellas, así que estamos seguras de que se ha alojado aquí con su familia.
Y lo más probable es que, como pasa con el resto de famosas que colaboran con marcas en sus redes sociales, la estancia en este lujoso hotel le haya salido gratis a Ana Boyer, Fernando Verdasco y sus niños, a pesar de que una de sus habitaciones más lujosas puede llegar a costar casi ¡¡¡3.000 euros cada noche!!!
El hotel se encuentra en primera línea de playa y se describe como "el hotel en Marbella que mejor combina el lujo casual, un exquisito ambiente acogedor y la comodidad de estar en el centro de la ciudad sin prescindir de unas espectaculares vistas al mar, ya que se encuentra frente a la playa, en pleno paseo marítimo y a sólo 5 minutos del Casco Antiguo".
Sus interiores se han modernizado para adaptarse a los nuevos tiempos, mezclando lo antiguo con lo moderno.