La dura historia de Joel, con parálisis cerebral, y su familia afectada por la DANA
Esta vecina de Paiporta, afectada por la DANA, pidió ayuda a la reina Letizia, que se emocionó al escucharla

Joel con sus padres.
La gota fría se cebó especialmente con Paiporta, un municipio situado a pocos kilómetros de Valencia, que ha perdido todos sus comercios, se ha quedado sin metro e incomunicado y sigue en una situación muy crítica. Como la que están viviendo Elena León, de 46 años, y su marido Israel, de 50.
Ambos tienen un hijo, Joel, de 17 años, con parálisis cerebral de nacimiento. Una situación ya de por sí difícil, que se ha visto agravada por la DANA. El temporal les pilló en casa de los padres de Elena (donde viven los tres desde hace un tiempo), situada a muy pocos metros del ya famoso barranco del Poyo. A pesar de la intensa lluvia y del río descontrolado, Elena quiso intentar recuperar su furgoneta, "que son los pies de mi hijo". Tres personas evitaron que se metiera en ella, lo que habría tenido consecuencias mortales.

Casas arrasadas por la DANA.
Desde entonces, Joel no sale de casa (antes lo hacía a diario) y Elena está luchando por conseguir una furgoneta y por poder recoger un carro ortopédico nuevo para Joel (lo tienen en Valencia, pero no puede desplazarse hasta allí).
Ella y su marido tienen una minusvalía y no trabajan; viven con una pequeña pensión y con la ayuda de la ley de dependencia que recibe Joel, por lo que cuentan con pocos ingresos.
Después de recorrer juntas Paiporta y conocer de primera mano el panorama desolador, me desplazo a la casa de sus padres, donde se encuentran su marido y su hijo. Hablamos con Elena León.
"Joel es un bebé de 17 años y la furgoneta es vital para él"

Un comercio afectado por las inundaciones.
PRONTO: Hiciste todo lo posible por salvar la furgoneta.
ELENA LEÓN: Totalmente. Si no llega a ser por tres chicos que me alertaron, no lo cuento. Para nada imaginaba que iba a venir esa tromba de agua. Si llego a estar sola, me lanzo a por el coche.
P.: ¿Cómo afecta esto a Joel?
E.L.: Mi hijo no se mueve, no habla ni oye, tiene epilepsia, problemas respiratorios, deformación en los huesos... Hemos de ayudarlo para todo, incluso para ir al baño. Joel es un bebé de 17 años. La furgoneta es vital para él, ya que nos permite llevarlo al colegio, pasear y viajar, algo que a Joel le encanta.
"Al conocer mi historia, Letizia me abrazó, llorando"

Elena hablando con Letizia.
P.: Llegaste a pedir ayuda a la reina Letizia en su visita a Paiporta.
E.L.: Sí. Le dije, de madre a madre, que tenía un hijo con parálisis cerebral y sin medicación. Le pedí que nos ayudara, que pusieran medios y trajeran médicos. Igual que mi hijo, hay otros en situación parecida y personas mayores que no pueden moverse. Una mujer me agradeció que diera voz a muchos casos similares.
P.: ¿Cómo reaccionó Letizia a tu petición?
E.L.: Me abrazó, llorando, y me dijo que iba a hacer lo que estuviera en sus manos. Me pidió la dirección de casa de mis padres, pero, a día de hoy, sigo sin respuesta. Al Rey también le pedí que nos ayudara. Le traté de tú, me dio la mano y me abrazó, y me dijo que pondría todos los medios de su parte.
"La solidaridad de la gente me hace tirar hacia delante"

Vecinos en una manifestación solidaria con las víctimas de la DANA.
P.: Habéis recibido apoyo de muchos voluntarios y gente anónima.
E.L.: Edu, un chico de Vigo, trajo medicación para mi hijo, y le estoy sumamente agradecida. Se quedó en casa a comer y dormir, lo quiero con locura y es parte de mi familia. Él fue y será mi ángel. El apoyo y la ayuda que estoy recibiendo es lo que me da fuerzas para seguir. La solidaridad de la gente me hace tirar hacia delante y me da mucho ánimo. No tendré vida para agradecerles tanto. Sé que saldremos adelante, aunque ahora cueste. Hay que seguir luchando por Joel, que es mi vida. Doy gracias por estar viva, pero llevamos mucho a nuestras espaldas.
ISRAEL: Estoy muy agradecido a los voluntarios y gente anónima que han venido a ayudarnos. Y, en especial, a la gente joven, a la que tanto criticamos y llamamos generación de cristal, porque son los primeros que han dado el callo y ayudado a todo el mundo. Hay muchísima humanidad.

Un animador da la bienvenida a los niños en un colegio de Aldaia.
P.: ¿Cuál ha sido la respuesta de la administración?
E.L.: Ninguna. Como nosotros, el resto de afectados de otros pueblos. Llevamos días haciendo caceroladas a las 8 de la tarde y pidiendo ayuda, porque la seguimos necesitando. Esto es una guerra.
P.: Cuéntame cómo es tu día a día.
E.L.: Salgo a recoger comida caliente y a buscar medicación, aparte de limpiar la casa. En Paiporta no hay nada abierto, sólo una farmacia.
P.: ¿Qué haréis cuando tengáis la furgoneta?
E.L.: Lo primero, ir a por el carro adaptado para mi niño, para que él vaya cómodo y podamos volver a salir a la calle y disfrutar del aire libre. Joel se pasaría la vida en la calle; le encanta ver los coches pasar.

Coches afectados por la DANA.
La plataforma de crowdfunding que Elena puso en marcha para recaudar dinero y la difusión que su caso ha tenido han servido para que la valenciana consiga una furgoneta para Joel. Es más, un chico de Zaragoza había contactado con ella para decirle que le daba su furgoneta. Con ella, Joel puede volver a salir y, poco a poco, recuperando la tan ansiada normalidad.