Sale a la luz el tesoro oculto del gemelo del Titanic
Más de un siglo después de su hundimiento en 1916, el Britannic revela objetos inéditos recuperados del fondo del mar Egeo

Imagen del Britannic cuando navegaba como buque hospital por el Mediterráneo.
Más de un siglo después de su hundimiento, el Britannic, barco hermano del celebérrimo Titanic, es noticia: un equipo de buceadores ha logrado, por primera vez, recuperar objetos de este barco hundido a 120 metros de profundidad en el mar Egeo, cerca de la isla griega de Ceos.
Un barco más seguro que el Titanic

Sus restos en el fondo marino, relativamente bien conservados.
Los buceadores, que trabajaron en condiciones muy adversas por la presión del agua, la oscuridad y las fuertes corrientes, sacaron del interior del trasatlántico una campana de alarma, una lámpara de señalización, binoculares, piezas de los lavabos y menaje de cocina, entre otras piezas, que han quedado depositadas en el museo de antigüedades submarinas de El Pireo, muy cerca de Atenas.

Un submarinista entrando por un boquete del casco.
Botado en 1914, dos años después del desastre del Titanic, Britannic era mejor que su gemelo, pero no llegó a cruzar el Atlántico.
Jacques Cousteau lo descubrió en 1975

Objetos recuperados.
Requisado por la Armada inglesa tras estallar la I Guerra Mundial, se transformó en buque hospital y navegó poco: se hundió el 21 de noviembre de 1916 al chocar contra una mina alemana.

Durante décadas, el Britannic permaneció intacto bajo el mar hasta que, en 1975, el equipo del oceanógrafo francés Jacques Cousteau localizó sus restos.

Desde entonces se habían realizado diversas expediciones, pero nunca se habían recuperado piezas del interior… hasta ahora.