Anita Williams explica en qué punto está su relación con Montoya tras su brutal discusión en 'Supervivientes'
Tras explotar en 'Supervivientes', Anita Williams se sienta en '¡De viernes!' y desvela cómo están las cosas con Montoya
Anita desvela cómo está tras su pelea televisada con Montoya al finalizar 'Supervivientes'
24 horas después de su discusión en directo con Montoya, Anita Williams se sienta en '¡De viernes!' para hablar de su difícil pasado. Pero además de hablar sobre su infancia y adolescencia, ha contado cómo está su relación con el sevillano.
Anita ha confesado que "en Supervivientes he vuelto a encontrarme", y es que cuando participó en 'La isla de las tentaciones' no se sentía ella misma. Además, se ha mostrado arrepentida de haber caído en la tentación.
Anita Williams, sobre Montoya: "El amor no se va en un día ni en una semana"
Pero, ¿qué ha pasado en estas horas tras la fuerte discusión en el debate de 'Supervivientes'? Después de la gala, Anita Williams ha contado en '¡De viernes!' que se fue con su madre al hotel directa, y que desde entonces no ha hablado con Montoya. "He llorado mucho. Me sentía culpable de decir algo que es verdad", ha explicado, detallando que se sintió acorralada, pero que sintió la necesidad de contar lo que había pasado realmente.
Además, asegura que ni ella ni Montoya están preparados para plantearse ni siquiera ser amigos. "No nos sabemos querer bien. Tenemos que aprender a centrarnos en nosotros". Eso sí, sigue enamorada: "El amor no se va en un día ni en una semana".
La adolescencia marcada por el bullying de Anita Williams
En cuanto a su adolescencia, ha explicado que "fue dura" porque "pasé por una etapa de bullying en el colegio" y eso le hizo "rebelde y me empecé a juntar con lo peor del colegio y después con lo peor de Barcelona, gente que robaba en tiendas y demás".
Una actitud conflictiva que también tenía con sus seres queridos, ya que "a mi madre se lo he hecho pasar muy mal, le hacía llorar conscientemente, le decía que era la peor madre"... pero lo peor llegó cuando "cogí una camiseta en una tienda con un DNI de otra persona, a esa persona le llegó la denuncia y me denunció".
Anita habla de su entrada en prisión
Fue entonces cuando "me pusieron una condena" que no cumplió de manera completa y "a los tres o cuatro años" la condenaron a prisión por "quebrantamiento de condena". "Pasé cuatro meses, me lo tomé como una película y me junté con la ruina de allí dentro", ha confesado.
"Allí aprendí a quien no quería ser, esa persona que no paraba de hacerle sufrir a mi madre hasta sin querer", ha relatado. Se adaptó a su vida en prisión porque coincidió con "personas normales, unas que han tenido delitos súper graves, otras como tonterías... y al final son personas".
Lo peor de su estancia en prisión fue "el agobio de estar encerrada en cuatro metros, si llega" y también el conflicto que tuvo con la novia de una presa porque "se pensaba que me estaba liando con su pareja y un día saliendo del comedor me pegó por la espalda".