Felipe y Letizia: nos colamos en su residencia de Sevilla, el majestuoso 'Cuarto Alto' del Alcázar
El ‘Cuarto Alto’, con 20 estancias y una zona privada, es el refugio de Felipe y Letizia cuando visitan la capital hispalense

Cuando Felipe y Letizia viajan a Sevilla, no se alojan en un hotel ni en una residencia oficial cualquiera. Los Reyes descansan en uno de los lugares más espectaculares de la ciudad: el ‘Cuarto Alto’ del Real Alcázar, un espacio histórico, lujoso y casi secreto que solo se abre para ellos y sus compromisos institucionales.
Allí pasaron la noche tras la reciente cena oficial de la ONU, en un enclave que rezuma historia, arte y poder… y que está cargado de curiosidades que muy pocos conocen.
Una residencia repleta de historia
Aunque parte de sus 20 estancias puede visitarse con una entrada adicional, la mayor curiosidad la suscitan los aposentos cerrados al público, donde los Reyes descansan con total privacidad.
Este espacio, reservado exclusivamente para los Reyes, combina el encanto de siglos de herencia monárquica con el confort actual, convirtiéndose en un lugar simbólico donde la tradición y la intimidad se dan la mano.




El ala privada de Felipe y Letizia
Durante las estancias de la Familia Real, una puerta interior aísla las habitaciones reales del recorrido turístico. Los empleados del Alcázar saben que, cuando “esa puerta se cierra”, todo lo que queda tras ella se convierte en zona estrictamente privada, igual que ocurría en tiempos de don Juan Carlos y doña Sofía.




Arquerías nazaríes, yeserías mudéjares y artesonados renacentistas conviven en estancias como la cámara oficial, el mirador de los Reyes Católicos o el dormitorio de Pedro I.


El conjunto, restaurado en el siglo XIX tras terremotos e incendios, conserva tapices decimonónicos que recuerdan el paso de Isabel II, Alfonso XII y Alfonso XIII. Con la reciente visita de los Reyes, las salas volvieron a cerrarse, convirtiendo el palacio en escenario de gala.