Así son los sótanos secretos del Palacio Real de Madrid
Un vídeo de Patrimonio Nacional ha mostrado cómo son las misteriosas bóvedas del Palacio Real, uno de los rincones menos conocidos

El Palacio Real de Madrid.
El Palacio Real de Madrid es una de las visitas imprescindibles de la capital, con más de 135.000 metros cuadrados y 3.418 habitaciones que lo convierten en el más grande de Europa. Cada año, cerca de 1,5 millones de personas recorren salones como el del Trono o el de Columnas, y disfrutan de joyas como la Real Armería. Sin embargo, existe un espacio que permanece oculto a la mayoría de los turistas: los sótanos, un lugar lleno de historia y leyendas que hasta ahora apenas se conocía.
Los rincones ocultos del Palacio Real bajo tierra
Mientras en la parte superior todo es lujo y majestuosidad, los sótanos del Palacio Real muestran la otra cara del edificio. Antiguamente, allí se ubicaban las cocinas, los talleres de cerrajería, los almacenes e incluso un aljibe que abastecía de agua.
En estos corredores subterráneos, de más de un kilómetro de longitud, se descubren bóvedas imponentes construidas con ladrillo, pedernal y piedra, capaces de resistir incluso a un incendio, ya que no se utilizó madera en su edificación.
Uno de los sótanos se encuentra en la parte de poniente, con 20 metros de bajada hasta los jardines del Campo del Moro, y permite ver de cerca los cimientos del palacio. Otro se extiende bajo la calle Bailén, con espacios más amplios y techos altos, donde se conserva intacta la esencia arquitectónica del siglo XVIII.
Entre leyendas y curiosidades históricas
El recorrido mostrado por Patrimonio Nacional va desde la gruta de Camelias, a nivel de los jardines, hasta 12 metros por debajo de la Plaza de Oriente.
Estos rincones misteriosos alimentan la leyenda de que Felipe V habría provocado el incendio del antiguo Alcázar para levantar un palacio al estilo francés. Lo cierto es que la construcción comenzó en 1738 bajo el arquitecto Filippo Juvarra, inspirada en el Louvre, y fue terminada por su discípulo Giambattista Sacchetti.

El interior del Palacio Real sigue siendo un espectáculo. Desde el majestuoso Salón del Trono, decorado por Giambattista Tiepolo, hasta el comedor de gala creado en tiempos de Alfonso XII, que hoy acoge cenas de Estado con capacidad para 144 comensales.

A ello se suma la impresionante Armería, considerada junto con la de Viena la más importante de Europa. Rincones que, igual que sus sótanos secretos, convierten a este edificio en toda una joya arquitectónica.