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Sarah Ferguson se "comunica" con Isabel II a través de sus perros

Aunque es la exnuera del príncipe Andrés, Fergie mantiene una relación muy cercana con la familia real británica. Tras heredar los corgis de Isabel II, asegura que la monarca fallecida le habla a través de ellos

Sarah Ferguson.

Sarah Ferguson.

Cristina Lozano

Aunque Sarah Ferguson ya no forma parte oficialmente de la familia real británica, su vínculo con los Windsor sigue más vivo que nunca. A pesar de su divorcio del príncipe Andrés, duque de York, con quien estuvo casada durante una década, la relación entre ambos continúa siendo tan cercana que siguen compartiendo residencia en Royal Lodge, una mansión en Windsor que fue también hogar de la difunta reina Isabel II.

Los corgis reales: el legado más tierno de Isabel II

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Este lazo tan estrecho hace que no resulte extraño que Sarah —conocida cariñosamente como Fergie— siga sintiéndose parte de la familia.

De hecho, tras el fallecimiento de la monarca en 2022, fue ella quien recibió en herencia a dos de sus corgis más queridos: Muick y Sandy.

Desde entonces, la duquesa de York ha forjado un fuerte lazo con los animales, a quienes cuida con especial cariño.

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La reina Isabel II vivió siempre rodeada de perros.

Una exnuera que se comunica con su suegra: “Estoy segura de que es ella hablándome”

Pero lo más curioso de esta historia es que, según ha revelado en varias entrevistas, Fergie está convencida de que la reina Isabel II se comunica con ella a través de los perros.

“Al principio, cuando ladraban sin razón aparente, pensaba que la reina estaba cerca. Ahora, cada mañana, los canes vienen y me saludan ladrando. Estoy segura de que es ella, hablándome y recordándome que aún está aquí”, ha confesado emocionada.

Sarah Ferguson con los corgies de Isabel II.

Sarah Ferguson con los corgies de Isabel II.

Estas declaraciones, que han llamado la atención de medios británicos y fans de la familia real, reafirman el carácter siempre libre de Sarah Ferguson, así como su apego a la memoria de Isabel II.

Lejos de quedarse como una anécdota curiosa, la conexión que mantiene con los corgis simboliza también el profundo respeto y cariño que aún siente por su exsuegra, con quien compartió muchos momentos a lo largo de los años.

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