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URDANGARIN_CAP_BEVOLUTIVE

Bastante reacio a hablar con los medios, Iñaki Urdangarin ha sorprendido a todos al conceder una amplia entrevista al periódico 'La Vanguardia', donde relata su vida actual y también hace referencia al tiempo que pasó en prisión, una experiencia que asegura que ha influido en su presente.

Una de las cosas que agradece el exmarido de la infanta Cristina, que ahora reside en Vitoria con Ainhoa Armentia, es haber recuperado cierto anonimato y llevar un día a día tranquilo. "Mi vida es muy rutinaria. Madrugo, hago deporte, después me pongo a trabajar y, luego, me dedico a distintas aficiones y hago las labores de casa junto a mi pareja. Cuando tengo a mis hijos, pues disfruto de ellos. Es una vida ordenada. Me he vuelto a reencontrar con cosas de la sencillez, que después de todas las etapas de mi vida es lo que más me apetece", ha asegurado.

La infanta Cristina e Iñaki Urdangarin.

La infanta Cristina e Iñaki Urdangarin.

Iñaki Urdangarin, ahora coach deportivo

Pero lo que más le ilusiona es su trabajo como 'coach' en Bevolutive, un proyecto que empezó a acariciar en su estancia en la cárcel. "Dentro de prisión empecé a estudiar un máster de psicología de “coaching” y también bienestar emocional. Me empecé a formar para salir y ayudar a otras personas a plantearse cualquier reto, motivación o competencia que quieran mejorar", ha relatado.

Su empresa ofrece asesoramiento personal, empresarial y también deportivo, un campo que conoce muy bien Iñaki Urdangarin, que formó parte de la élite del balonmano.

Iñaki Urdangarin jugardor Barça balonmano

Iñaki cuando era jugador del Barça de balonmano.

Iñaki Urdangarin: "En la cárcel tenía mucho orden y eso me vino muy bien"

Como él mismo ha destacado en la entrevista, mientras cumplió condena mantuvo una rutina que le resultó beneficiosa. "Por la mañana desayunaba y después estudiaba hasta las 15 h más o menos. Luego hacía deporte. Por la tarde ya me dedicaba más a otro tipo de lecturas y escribía cartas. Eso también me fue muy bien. Entonces, la catarsis de escribir, la catarsis de leer una novela que te lleva a otro sitio, ayudaba mucho. Los periódicos, cuando me los traían las visitas, pues también los empollaba. Tenía mucho orden. Y el orden me vino muy bien", ha reconocido. A la hora de realizar actividad física, tuvo una gran aliada. "La bicicleta estática está entre las cosas que me ayudaron a mejorar", ha señalado.

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