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José Luis Gil: así es el centro donde hace rehabilitación tras su ictus

El querido actor lleva meses recuperándose, con el amor y cuidados de su familia, del ictus que sufrió en un prestigioso centro

José Luis Gil, antes de sufrir el ictus.

Redacción

José Luis Gil debe gran parte de su recuperación al Centro de Rehabilitación Neurológica Lescer, pionero en España en el tratamiento del daño cerebral adquirido (DCA). Éste cuenta con un gran equipo de profesionales y con Planes de Rehabilitación totalmente Individualizados (PRI), en los que se marcan las actividades a desarrollar, los objetivos funcionales comunes y los plazos para la consecución de éstos.

El centro donde hace rehabilitación el actor.

Gran parte del éxito de la rehabilitación neurológica en este centro se debe al trabajo transdisciplinar de los profesionales. Y es que cuando llega un paciente como Gil, lo primero que se pauta es un PRI acorde a sus déficits y necesidades iniciales, se establece, además, el equipo terapéutico que va a trabajar con él. Dentro de éste se asigna quién cumplirá la función de tutor para hacer de nexo de unión entre la familia del usuario y el equipo de terapeutas.

Una vez iniciadas las terapias, todas las áreas implicadas en la rehabilitación trabajan unidas para alcanzar el objetivo final que no es otro que conseguir la reinserción familiar, social y laboral.

Áreas implicadas en la rehabilitación

Los planes de rehabilitación del Centro Lescer implican diferentes áreas de trabajo. Las principales son:

Fisioterapia. Ésta se centra en conseguir el mayor grado de autonomía física de los pacientes y la optimización de sus recursos motores. Tratan, entre otros, la rigidez y espasticidad, el equilibrio, la coordinación y las alteraciones de la sensibilidad.

Logopedia. Evalúan y trabajan los trastornos de comunicación e intentan recuperar al máximo las funciones del habla, lenguaje y las cognitivas.

Neuropsicología. La clínica cuenta con diversos tratamientos para hacer frente a patologías como alteraciones de la visión, emocionales o conductuales, en las que hay involucradas deficiencias, daños o lesiones en los mecanismos cerebrales implícitos en uno o más comportamientos.

Sin duda, entre el inmenso cariño de su familia y los cuidados y tratamientos de este prestigios centro, José Luis Gil se encuentra en el mejor camino hacia su total recuperación, que deseamos llegue bien pronto.