Kiko Rivera: así es su nueva vida de soltero
Kiko Rivera intenta rehacer su vida tras su ruptura con Irene Rosales. Se ha mudado, ha borrado sus redes y lucha por estar cerca de sus hijas
Aunque Kiko intenta aparentar una tranquilidad absoluta, la procesión va por dentro. Inicia una nueva vida nervioso y en tensión, tal y como nos cuenta una fuente muy cercana al "dj".
"No se esperaba esta ruptura definitiva. Él era consciente de que la situación era límite, pero confiaba en poder reconducir su matrimonio, algo que no entra en los planes de Irene, que ya le dijo bien claro que no aguantaba más una unión marcada por episodios más que desagradables. Kiko priorizaba a sus hijas, las fiestas con sus amiguetes y su trabajo por encima de su esposa, y al final pasó lo que tenía que pasar", nos explican.
"Irene ha aguantado carros y carretas"
Una compungida Irene, muy dolida por la exclusiva que le adjudican. "Estoy muy enfadada porque no he dicho ni una sola palabra", ha comentado.
Las personas más cercanas a la pareja intuían, o sabían, lo que estaba por venir. Ellos, mejor que nadie, advertían determinadas situaciones que presagiaban un final infeliz. "Sabíamos desde hace meses que el matrimonio no funcionaba y que se iban a separar", decía Raquel Bollo en 'Tardear'.
"Irene ha aguantado carros y carretas", nos cuenta María, del entorno de la recién separada. "Lo ha pasado muy mal y, aun así, perdonaba lo imperdonable. Kiko se ha portado fatal con ella", añade nuestra fuente.
Kiko con sus hijas en Huelva.
Tras el anuncio de la separación, el hijo de Isabel Pantoja ya se ha llevado sus cosas del domicilio conyugal y ha comprado una casa que está cerca de la de sus niñas, Ana y Carlota. Es lo que peor lleva, no verlas cada día, no llevarlas y recogerlas del colegio... Y es que, a pesar de todo, Kiko es un padrazo. Prueba de ello es el fin de semana que ha pasado con ellas en Huelva, en el que han disfrutado de buenos momentos los tres juntos. "No tengo nada que ver con el Kiko de hace 10 años. Esa etapa quedó atrás. Sigo con ganas y fuerzas para superarme cada día un poquito más", afirmaba en sus redes sociales, de donde ha eliminado todas sus publicaciones. "Lo hice porque los buenos recuerdos ya están dentro de mí y siento que es hora de empezar de cero", ha explicado.
Irene estaría ilusionada con un pastelero
Sus amigos, así como su hermano Cayetano y su prima Anabel, están siendo un gran apoyo para Kiko en estos momentos tan duros para él.
Sin embargo, el fantasma de la infidelidad no ha desaparecido en los 11 años de relación sentimental de la pareja. De hecho, Saúl Ortiz nos corrobora una información que desveló en 'Fiesta', en la que aseguraba que Kiko mantuvo una relación de años con una chica que salía en su videoclip 'Mentirosa', desde 2018. "A él le gustó en cuanto la vio. Decía que era igual que Shakira", cuenta.
Enrique C. también conoce bien al protagonista de este reportaje. Fue compañero de juergas y excesos y hoy cree que "Kiko no va a caer de nuevo en tentaciones “prohibidas"". Parece que el amor por sus hijas así como sus compromisos profesionales frenan los ímpetus de antaño. Además, tiene a su lado el apoyo de muchos amigos y familiares, como el de su representante, Fran; el de su hermano Cayetano y el de su prima Anabel.
En el caso de Irene, ya se habla de que podría haber aparecido un nuevo hombre en su vida. "Ese hombre existe y la ilusión de Irene con él es muy real. De momento se están conociendo", asegura a nuestra revista la periodista Almudena Del Pozo. Y es que, aunque en un principio se barajaba la posibilidad de que fuera un monitor de su gimnasio, desde 'Tardear' apuntaban a que estaría viendo a un atractivo pastelero.
Y mientras se suceden las informaciones sobre esta inesperada separación, cuentan que Isabel Pantoja nunca se llevó bien con Irene, a la que considera "una loba con piel de cordero". Y ya hay quien piensa que este fracaso matrimonial podría propiciar un acercamiento entre la tonadillera y su hijo.
Lo que está claro es que Kiko e Irene quieren que su ruptura sea lo más civilizada posible por sus hijas. No desean un enfrentamiento a estas alturas. No hay marcha atrás y lo más lógico sería mantener la cordura y la cordialidad.