Mar Flores: "He tenido mucho miedo y me he escondido"
Más fuerte que nunca, la empresaria responde con calma a quienes han levantado polémica tras la publicación de sus memorias
Mar Flores se siente más fuerte que nunca
No le importa que su libro haya desatado tormentas inesperadas. A pesar de todo lo que se ha dicho y publicado desde que saliera a la venta, Mar Flores confiesa seguir como anuncia la portada de sus memorias, en calma. Es más, se ratifica en la importancia de haber sacado al mercado un manuscrito con su historia contada por ella porque la sociedad, dice, sigue sin avanzar. Porque sigue siendo juzgada, desmentida, y su historia la siguen contando otros.
Así lo dijo en la presentación de su libro, donde estuvimos presentes: “He tenido la sensación de que en los años 90 me metieron en una cámara del tiempo y que me he despertado en 2025 y siguen pasando muchas de las mismas cosas que me pasaban antes. En cuanto a mí, no ha cambiado nada. Ni antes ni ahora he intentado ni santificarme ni hacerme la víctima; pretendía que este libro fuese un relato que hiciera reflexionar o empatizar con mujeres que han vivido las mismas experiencias que yo”, dijo antes de confesar: “Quizás tengo que entonar el mea culpa porque he sido educada en la discreción, en el silencio, en aguantar los golpes una y otra vez, en esconderme, en disfrazar las cosas, en querer dar a los periodistas una imagen de fría, frívola y distante, ante de mostrarme como soy. Y hoy puedo decir que se ha acabado, que soy una mujer nueva y que esto a ninguna mujer más le puede volver a pasar”.
Mar Flores: “He perdonado, no necesito dar ningún paso agresivo hacia nadie”
No sólo es una mujer nueva, es más fuerte que nunca, “un mujerón”, confesó en la presentación realizada en La Casa del Libro de la Gran Vía madrileña, donde estuvo rodeada de amigos -Boris Izaguirre, Tania Llasera o Jaime Astrain- y familiares, como su sobrina Laura Matamoros. Su hijo Carlo, dijo, no fue porque “estaba trabajando”.
PRONTO: ¿Te preocupan las demandas?
MAR FLORES: ¿Pero por qué me van a demandar? ¿Quién ha dicho eso?
P.: Porque consideran que no salen bien parados. Carlo Costanzia padre ha dicho que te va a demandar.
M.F.: Creo que si hay algo de lo que me siento orgullosa es de estar hoy aquí en calma y con tranquilidad. De haber perdonado a las personas que me han hecho daño y de sentirme que no necesito dar ningún paso agresivo hacia nadie. Ha habido un momento de mi vida en el que he tenido mucho miedo y me he escondido, o me he callado, o quizás he retirado denuncias. Pero hoy en día no tengo miedo, no me voy a esconder, voy a responder a todas vuestras preguntas. Y si me ponen una denuncia voy a ir adelante, y si la tengo que poner yo, pues también.
Un proceso de transformación personal
P.: La prensa fue dura contigo. ¿Has perdonado a todas las personas que lo hicieron?
M.F.: No se olvidan los malos ratos, no se olvida el sufrimiento, pero se perdona. Y es algo que ya he dicho: mi libro es el fruto de un trabajo de sanación y perdón.
P.: ¿Por qué no sale Elías Sacal en el libro?
M.F.: Pero como tanta gente que no sale. Es que si salen, se enfadan; si no salen, también se enfadan. Hay mucha gente que quiero que no sale, y eso no significa nada.
P.: Dedicas el último capítulo a alguien…
M.F.: Eso es secreto. A lo mejor en otro libro…
Memorias que marcan un antes y un después
P.: ¿Empiezas de cero con todo el mundo y contigo misma?
M.F.: Hace muchos años que estoy viva y tranquila. Y ahora está reflejado en este libro. Es un documento de superación. Y me hubiera encantado no mencionar a nadie en el libro, y lo he pensado mucho, pero es que es mi vida y han formado parte de ella. Y si a estas personas no les gusta haber formado parte de mi vida, peor para ellos. Yo los he nombrado porque he aprendido mucho, muchísimo. De las cosas malas se aprende.