María Jiménez: la menguante herencia que ha dejado a su hijo Alejandro
Alejandro Jiménez es el único heredero de la artista, aunque su patrimonio no era tan abultado como podíamos pensar...
María y Alejandro Jiménez, en una imagen de redes sociales.
No hay duda de que esta ha sido una semana negra para la cultura española: el martes amanecíamos con la triste noticia de la muerte de María Teresa Campos y, apenas 48 horas después, teníamos que despedirnos de la cantante María Jiménez.
Sevilla está de luto por la pérdida de esta trianera, que hizo gala de su tierra por todas partes. Pero, aunque su carrera fue muy exitosa y duró décadas, lo cierto es que, al final de su vida, el patrimonio de María Jiménez no era tan alto como podíamos pensar. O, al menos, no en ese momento, ya que antes sí que lo fue.
Alejandro, su único hijo vivo, que ha sido el encargado de revelar cómo fueron las últimas horas de su madre, será, presumiblemente, su heredero universal, y quien se encargue de gestionar a partir de ahora los bienes de la artista. Pero, ¿qué heredará el joven de la cantante?
María Jiménez mostró en 'Mi casa es la tuya' su vivienda en Chiclana.
Su casa de Chiclana: la única propiedad que tenía María Jiménez
Pese a haber llegado a amasar un vasto patrimonio, especialmente estando casada con Pepe Sancho, en sus últimos años la sevillana solo tenía a su nombre su casa, situada en la localidad gaditana de Chiclana de la Frontera y que pudimos ver hace algún tiempo en 'Mi casa es la tuya'.
Según Vanitatis, se trata de "una casa independiente con una parcela de 3.300 metros cuadrados sobre la que hay construida una vivienda de 140 m²". Aunque la compró estando casada con Sancho, en 1990, solo la puso a su nombre y así ha seguido hasta hoy, que pasará a manos de Alejandro, el único hijo que tuvo la pareja.
Se desconoce si Alejandro conservará la casa de su madre o la pondrá a la venta pero, tal y como explica el citado medio, "según precios actuales y teniendo en cuenta la extensión de la finca, podría vender hoy este inmueble por hasta medio millón de euros".
Aunque en sus últimos años solo le quedó a María Jiménez su casa de Chiclana, lo cierto es que la cantante llegó a contar con varias propiedades: un piso de lujo en plena Gran Vía, en Madrid, y otro chalet familiar en la urbanización El Bosque, también en la capital. Estas viviendas, junto con la de Chiclana, fueron adquiridas por la cantante durante su matrimonio con Pepe Sancho, pero gracias a que la pareja tenía separación de bienes, ella pudo conservarlas al separarse... aunque más tarde se deshiciera de casi todo.