Míriam Ungría, una princesa española en la corte de Jordania
Cuando se han cumplido dos años de su matrimonio con el príncipe Ghazi, primo del rey Abdalá, se ha adaptado muy bien a su vida dentro de la Familia Real

Míriam Ungría.
Recientemente, el rey Felipe VI viajó, en visita oficial a Jordania, invitado por el rey Abdalá, hijo y heredero del inolvidable rey Hussein, que me honró con su amistad, y de Muna, la segunda de las cuatro esposas que tuvo. Durante su visita al país jordano, Felipe se encontró con una española y vieja amiga mía y suya, Miriam Ungría, nacida en Madrid hace 61 años, en el seno de una familia de alto nivel económico. Su padre, Bernardo Ungría, era presidente de un importante grupo empresarial y su madre, la aristócrata Carmen López y Oleaga.

Felipe VI, Abdalá y el heredero.
Miriam reside en el país hachemita desde hace dos años, cuando contrajo matrimonio con el príncipe Ghazi bin Muhammad, primo del rey Abdalá y su asesor para Asuntos Religiosos y Culturales, adoptando el nombre de Miriam al-Ghazi ben Talal de Jordania.
Por ello, como miembro de la Familia Real hachemita estuvo en el recibimiento al Rey español, junto al que apareció resplandeciente y mostrando su alegría por volver a ver a Felipe, a quien le une una larga amistad desde que estaba casada con mi amigo Kardam de Bulgaria.

Míriam en el día de su primera boda, con Kardam de Bulgaria.
Porque en esta historia no sólo conozco a la Familia Real jordana sino también a la del anterior matrimonio de Miriam: la familia del exrey de Bulgaria, Simeón, y su esposa, Margarita Gómez Acebo, grandes amigos y vecinos míos en Madrid y de cuya boda, el 21 de enero de 1962 en la ciudad suiza de Vevey, fui testigo.
De ese matrimonio, indiscutiblemente por amor, nacieron cinco hijos: Kardam, Kyril, Kubrat, Konstantin y Kalina. Y fue del primero de ellos, Kardam, príncipe de Tirnovo, de quien Miriam se enamoró. Se conocieron en los años 80 en la discoteca Joy Eslava y contrajeron matrimonio ortodoxo en 1996.
La tragedia de su primer matrimonio

Miriam besa orgullosa a su hijo Boris en su graduación.
Fue el suyo un matrimonio muy feliz, del que nacieron dos hijos, Boris y Beltrán. Kardam, licenciado en Economía en Inglaterra, fue un financiero muy importante y Miriam trabajó como diseñadora de joyas para la firma Carrera y Carrera hasta que decidió lanzar su propia marca. Pero en agosto del 2008, tuvieron un terrible accidente de tráfico. Miriam estuvo largo tiempo hospitalizada y Kardam sufrió tales heridas que le dejaron secuelas irreversibles y que provocaron su prematura muerte en el 2015.

Miriam y su segundo marido, el príncipe Ghazi Bin Muhammad.
Tras la muerte de su esposo, Miriam y sus hijos se trasladaron a vivir a Londres y, gracias a los estrechos lazos entre las casas reales búlgara y jordana, trabó amistad con el príncipe Ghazi, hijo del príncipe Muhammad bin Talal de Jordania y profesor de filosofía y escritor, de 57 años, que estudió en las universidades de Princeton y Cambridge y, más tarde, en la Universidad del El Cairo.
La amistad entre los dos era tan profunda, que el príncipe jordano, en el 2021, hizo levantar un monumento en el río Jordán en honor a Kardam de Bulgaria. Estaba claro que esta historia iba a ser una segunda oportunidad en el amor para Miriam. Y la aprovechó.

Porque, poco a poco, esa amistad fue convirtiéndose en algo más hasta el extremo de que el príncipe se divorció de su esposa, Areej Zawawi, en el 2021, para poder casarse con la que hoy es la mujer de su vida. La pareja contrajo matrimonio en el palacio de Raghadan y en total intimidad el 3 de septiembre del 2022. A la boda no sólo asistieron los cuatro hijos del novio, sino también los dos de la novia, Boris y Beltrán, así como el rey Abdalá.
Centrada en su papel institucional y en el apoyo a oenegés jordanas

La vida de Miriam ha cambiado mucho. En Amán, la princesa, que, según el palacio real de Sofía, mantiene su fe ortodoxa, religión a la que se convirtió en su matrimonio con Kardam, lleva una vida tan discreta como la que ha mantenido en los últimos años en Londres, donde viaja con frecuencia para visitar a sus hijos.

Miriam y sus hijos, Boris y Beltrán, junto al monumento que el príncipe Ghazi mandó construir junto al Jordán en honor de Kardam, primer marido de la española.
La princesa, que parece haber cerrado su negocio de joyería y mantiene inactivas su web y sus redes sociales desde febrero del 2022, está centrada básicamente en acompañar a su marido en sus obligaciones institucionales y apoyar a diferentes organizaciones benéficas en Jordania. Además, está plenamente integrada en la familia de su marido, y la hemos visto no sólo en actos institucionales sino también en eventos privados, como en junio del año pasado en la boda del heredero jordano.