Los negocios de Beatriz Trapote y Víctor Janeiro lejos de la tele
La pareja ha encontrado en Cádiz el lugar perfecto para criar a sus hijos y desarrollar varios proyectos emprendedores con gran éxito
Aunque ya no aparecen tan a menudo en televisión como en años anteriores, Beatriz Trapote y Víctor Janeiro han construido una sólida vida familiar y empresarial en plena Sierra de Cádiz.
Desde su residencia en El Bosque, el matrimonio ha apostado por una vida tranquila con sus tres hijos y por varios negocios que combinan desde el turismo rural hasta la gastronomía.
Una preciosa casa rural en El Bosque
Uno de los pilares de su actividad económica es "Villa Viruta", una casa rural ubicada en El Bosque que ellos mismos gestionan. Con capacidad para alojar a familias que buscan desconectar, esta vivienda ofrece piscina, zona de barbacoa, cocina equipada y unas vistas espectaculares.
Beatriz y Víctor no solo gestionan directamente este alojamiento, sino que además lideran una sociedad enfocada en el turismo sostenible. Según los registros públicos, el alojamiento está a nombre de ambos y forma parte de una empresa con enfoque sostenible. La pareja se encarga personalmente de todos los detalles del hospedaje, desde la atención a los clientes hasta la gestión diaria.
Establecidos en un entorno natural privilegiado como la Sierra de Grazalema, han aprovechado la demanda creciente del turismo de interior para crear una propuesta pensada para quienes buscan calma, naturaleza y un ambiente familiar. Todo ello, mientras crían a sus hijos Víctor Jr., Oliver y Brenda en un entorno lleno de tranquilidad.
Beatriz Trapote también apostó por la belleza
Más allá del turismo rural, Beatriz Trapote también lanzó su propio proyecto en el mundo de la estética. En 2021 abrió un centro de uñas en Arcos de la Frontera, especializado en manicura, pedicura y tratamientos de belleza. Este negocio, a pesar de que le permitió desarrollar una faceta más personal y ganar independencia laboral, cerró sus puertas el pasado 30 de abril, según nos ha confirmado la misma Beatriz Trapote.
Una heladería y presencia en redes sociales
Otro de los negocios que pusieron en marcha fue una heladería inspirada en el estilo asiático, donde los helados se preparan al momento sobre una plancha a -20 °C. Abierta en Dos Hermanas, Sevilla, la idea surgió tras la pandemia y sigue operativa a pesar de haber estado en proceso de traspaso. Estos originales helados en forma de rollito se pueden personalizar con diferentes sabores y toppings.
Además, tanto Víctor Janeiro como Beatriz Trapote se han convertido en rostros habituales de las redes sociales. Allí promocionan todo tipo de productos: trajes de ceremonia, jamón ibérico, coches de alta gama e incluso menús de cadenas de comida rápida.
La pareja no se cierra a ninguna oportunidad y han sabido transformar su presencia pública en una fuente de ingresos adicional. A través de colaboraciones, muestran su día a día y refuerzan la imagen de una familia unida, trabajadora y muy emprendedora.
