Mael, un pequeño gran ejemplo de superación
Le amputaron las piernas y las manos para salvar su vida y, seis meses después, ya camina con sus prótesis
A Mael, la vida le dio otra oportunidad y decidió cogerla por los cuernos, como los de esos dragones que tanto le gustan, y volar sobre su lomo. ¡Con solo 3 años!
El 5 de junio, este niño asturiano, que nunca se queja, dijo tener dolor de barriga, y unas manchas de color púrpura en la piel alertaron a su madre, Nerea, que es enfermera. En el hospital, le diagnosticaron una infección por meningococo tipo B, la más virulenta.
El valor de un niño y la fuerza de una familia
Para salvar su vida, le amputaron las piernas y las manos. Tras diez días de coma inducido, Mael despertó con una sonrisa y empezó a convivir con su nueva realidad sin una sola queja.
Al poco de volver a casa, subió las escaleras gateando, empezó a coger cosas sin adaptadores y se emocionó con sus nuevas "piernas de robot", como dice él.
Pablo y Nerea vieron en su hijo, de solo 3 años, un ejemplo de superación y decidieron compartir su historia en Instagram donde escribieron: "Queremos que el mundo sepa que no hay barreras, que el límite no está en el cuerpo, sino en el miedo".
Los grandes logros del pequeño Mael
"Hoy Mael ha pelado un huevo cocido (...). Estos son los momentos que valen oro: cuando demuestra la fuerza, la constancia y las ganas inmensas que lleva dentro".
"Ha caminado unos cinco metros él solo. Cinco metros, que para muchos son poco… para él son un universo entero (...) Hoy ha dado un paso gigante".
"Hoy ha sido un día increíble. Gracias al estupendo equipo de MediaLab por todo lo que me están ayudando con mis prótesis".
"Sigue trabajando con sus manitas recién amputadas para estimular la nueva piel, mejorar la sensibilidad, la coordinación y la motricidad fina".
"En algo tan simple como ponerse azúcar, se ve todo lo que ha ido construyendo: seguridad, autonomía, tranquilidad y un control que mejora día a día".