Jorge Salvador nos cuenta los mejores momentos de El Hormiguero
Con motivo de la celebración de sus 3000 programas, Jorge Salvador nos desvela algunos de los instantes más anecdóticos que quedarán en la memoria de los espectadores
Poco podía imaginar hace 20 años Pablo Motos cuando puso en formación a su batallón de colegas de las ondas de M80 Radio para mudarse a un plató televisivo que aquel experimento que aunaba humor, entrevistas de actualidad, ciencia y curiosidad tendría un salto tan exitoso a las pantallas que dos décadas después acabaría celebrando sus 3000 emisiones.
Lo que nació como un pequeño refugio para la diversión y el entretenimiento -arrancó en Cuatro en septiembre de 2006 siendo un magazín de fines de semana, y en 2011 pasó a Antena 3, donde descubrieron en este espacio la panacea del “access”- se ha convertido en un titán televisivo, uno de los fenómenos más longevos y queridos del universo catódico, un lugar donde la ciencia se mezcla con las risas, la emoción y la sorpresa noche tras noche.
Por la mesa del de Requena han pasado más de 2.000 invitados, desde estrellas de Hollywood hasta héroes anónimos, y millones de espectadores han compartido con Trancas, Barrancas y compañía momentos extraordinarios que han conseguido que cada noche ocurra algo único.
Con motivo de esta emotiva efeméride hablamos con Jorge Salvador, productor y director del programa junto a Pablo Motos, para revivir las anécdotas y los instantes más mágicos de estas tres mil aventuras televisivas.
El momento más emotivo
Momentos de lágrima y emoción ha habido muchos en el plató de “El Hormiguero·, pero Jorge recuerda con cariño uno muy especial: “Hubo un momento en el que entró a plató una filarmónica de 60 músicos que estaban muy apretados y le pedimos a Harrison Ford que cogiera la batuta y dirigiera a la orquesta en el tema de ‘Indiana Jones’. Él cogió la batuta, empezó a mover la mano, y la orquesta sinfónica empezó muy lentamente a hacer el ‘tatarito, tatará...’.
De repente, se da cuenta de que va muy lento y él empieza a moverse con la mano más rápido hasta que le coge el punto y la orquesta sinfónica empieza a toca el tema a la velocidad correcta. Se produjo un momento de emoción que todo el plató, hubo tal vibración desde el público hasta la gente del equipo y la orquesta, que acabó todo el mundo con lágrimas en los ojos de lo emocionante que fue ver a Harrison Ford dirigiendo a una orquesta sinfónica tocando el propio tema de Indiana Jones. Fue un momento espectacular”.
Además, destaca: “Otro momento muy emotivo fue cuando fuimos a Londres la primera vez. Eran los años de la crisis en la que muchísimos jóvenes españoles tuvieron que irse fuera a ganar dinero, a hacer trabajos en hoteles, en restaurantes, de camareros, y ese día el público estaba formado por españoles muy jóvenes que estaban en Londres trabajando. En el momento en el que entramos allí y entró Will Smith a saludar se produjo un aplauso que provocó una emoción espectacular.
Aquellos jóvenes estaban muy agradecidos de que todo el equipo de ‘El Hormiguero’ se hubiera desplazado a Londres y estuviera allí delante de ellos. Fue un momento súper bonito y que tenía una carga muy emocional por el difícil momento de crisis que se estaba viviendo en aquel momento y sobre toda esa gente”.
El momento más dramático
“Creo que para mí -nos cuenta Jorge con emoción- el momento de mayor drama ocurrido en estos años fue el de la muerte de Marta Jiménez, colaboradora del programa, a la que llamábamos “mujer adrenalina”. Había hecho aquí cosas espectaculares y por desgracia este verano en un accidente personal en la montaña perdió la vida. Ése ha sido sin duda en estos veinte años el momento más dramático”.
El momento más terrorífico
Momentos en los que la audiencia o el propio equipo del programa han temido por la seguridad de sus colaboradores han sido muchos, pero Jorge recuerda uno en especial: “Yo donde he pasado más miedo fue con la visita del Doctor Splash. Éste es un hombre cuya habilidad es tirarse desde un trampolín de siete metros de altura a una piscina de juguete de tres palmos de agua. Sólo ver la altura que cogía este hombre cuando subía la escalera ya era terrorífico porque decíamos: ‘Y si se mata en directo, ¿qué pasa?’. En el momento en el que se lanzaba… estábamos todos aterrorizados. Yo decía: ‘Dios mío, posiblemente hoy sea el último ‘Hormiguero’ porque este hombre se va a pegar tal talegazo que aquí se acaba el programa’. Por suerte no ocurrió, no pasó nada, pero el susto todavía lo llevo encima y he de decir que años después nos volvió a llamar para volverlo a hacer, pero con la piscina llena de agua y de fuego. Y le dijimos que no, no queríamos volver a pasar ese miedo otra vez”.
Los momentos más épicos
“Yo creo que lo más épico que hemos hecho son los viajes que hemos realizados alguna vez para hacer entrevistas en Londres, en París o en Berlín a algún famoso de Hollywood. Lo hemos hecho con Will Smith, con Tom Cruise, con Tom Hanks, con Hugh Jackman o Nicole Kidman. Ver cómo todo el equipo de cien personas termina un programa aquí el jueves, se desplaza el viernes hasta estas ciudades con la infraestructura que supone (un camión de catorce metros debe salir una semana antes con todo el programa metido ahí dentro, los decorados, la ciencia…) y ver cómo el equipo ensaya allí el sábado por la mañana, graba por la tarde ya por la noche se desmonta todo para volver, para mí es muy épico”.
El momento más viral
Entre risas, Salvador recuerda: “Una de las cosas más virales y a la vez absurdas fue el ‘pa’tras’ de Diego el Cigala. Él cogió su pañuelo y empezó a decirle a Pablo: ‘Pa’tras, pa’tras’ no se sabe muy bien por qué… también hay que decir que venía muy contento y ese momento del pañuelo acabó siendo uno de los momentos más virales de ‘El Hormiguero’”.
Los momentos más estresantes
El primer programa de ‘El Hormiguero’ se emitió el 26 de septiembre de 2006.
“A mí lo que me estresa del programa -nos comenta Jorge- es el cómo llegan los invitados algunos días. Hay veces que vienen cansados porque vienen de promoción o vienen con mucha gente que a veces altera al invitado; hay actores de Hollywood que muchas veces vienen con quince personas y cada uno da su opinión: ahí hay publicistas, representantes, maquilladores, vestuario… hay mucha gente que opina y no es fácil ese momento. Ese recibimiento del invitado es para mí el momento más estresante”.
El momento más romántico
“Yo recuerdo un momento muy bonito: hace muchos años le hicimos a Nuria Roca una ecografía. Ella estaba embarazada de su hija, pero no sabía que era una niña, y le hicimos le ecografía y en directo le dijimos el sexo del bebé. Ese momento fue precioso, ver la cara de Nuria llorando en la camilla cuando le dijimos que era una niña, porque a ella le hacía ilusión, ya que ya tenía a los dos niños mayores, y esa niña hoy en día tiene 15 años, ¡cómo ha pasado el tiempo! Pero fue un momento para mí muy romántico”.
El momento más sorprendente
Jorge recuerda: “Me llega así en la memoria la visita de Russell Crowe de ‘Gladiator’. Llegaba agotado porque venía directamente desde Australia y la verdad es que estaba muy cansado. Yo cuando le pasé a Pablo el parte le conté que Russell venía destrozado, y que sería una entrevista complicada. Pero nos acordamos de que él tiene un grupo de rock y toca la guitarra, y decidimos regalarle la guitarra española de Pablo al principio del programa a ver si se animaba. Efectivamente él llegó con la cara cansada, como en la actitud de sacarse cuanto antes de encima el programa, pero a la segunda pregunta Pablo le regaló la guitarra y le cambió la actitud. Se apasionó con ese regalo, le hizo una ilusión bárbara y nos hizo luego un programa extraordinario.
Al cabo de un año fue muy curioso porque volvió a presentar otra película y nos pidió salir en solitario, porque venía con otra actriz. No entendíamos por qué, pero Pablo le dio paso y cuando salió de detrás de las cortinas llevaba una caja con una funda de una guitarra que traía desde Australia y era una guitarra suya personal con una firma muy chula, y era para devolverle el regalo a Pablo. Fíjate que lo que podría haber sido en la primera visita una entrevista complicada se transformó en una relación con Russell Crowe extraordinaria”.