Tarta de queso con mandarinas
¿Quieres preparar una tarta de queso con un toque especial? Las mandarinas te darán ese punto mágico que necesitas
La tarta de queso con mandarina es un postre que combina una base de galletas trituradas o masa quebrada con un relleno suave y cremoso a base de queso, generalmente queso crema, y se decora con mandarinas frescas o enlatadas.
Esta tarta es muy popular en la repostería y es apreciada por su equilibrio entre lo dulce del relleno de queso y lo refrescante de las mandarinas. Es un postre versátil que se puede personalizar según las preferencias de cada persona, y es una opción perfecta para ocasiones especiales o simplemente para disfrutar de un dulce capricho.
La tarta de queso con mandarinas es una delicia refrescante y dulce que combina la cremosidad del relleno de queso con la frescura de las mandarinas. Es un postre perfecto para darte un capricho. ¡Que la disfrutes!
Tarta de queso con mandarina
- Ingredientes
- • 1 lámina de pasta brisa
- • 3 huevos
- • 1 bote pequeño de leche condensada
- • 250 g de queso fresco para untar
- • 4 mandarinas
- • 2 cucharadas de mermelada de albaricoque
Tiempo Total50 minutos
Preparación15 minutos
Cocción35 minutos
Coste € € €
Dificultad
Postre Tipo de plato
Vegetariana Tipo de dieta
Temporada
4 Porciones
412 kcal/ración Info nutricional
Pasos
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01.
Precalienta el horno a 175ºC. Forra un molde para tartas con la lámina de pasta brisa, pincha la base con un tenedor y coloca encima un disco de papel de horno. Cúbrelo con un puñado de garbanzos secos y hornea durante 10 minutos.
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02.
Retira la tarta del horno, deja que se entibie unos minutos y quita el papel con los garbanzos.
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03.
En un bol, bate con la batidora eléctrica el queso con la leche condensada y los huevos hasta lograr una crema uniforme. Viértela en la base de pasta brisa y hornéala durante 25 minutos, aproximadamente, hasta que veas que está ligeramente cuajada y dorada.
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04.
Retira la tarta del horno y deja que se entibie antes de desmoldarla. Pincélala con la mermelada y cubre la superficie con gajos de mandarina, colocados de forma decorativa.
El truco de Pronto
Prueba esta deliciosa receta con otras frutas cítricas, como el limón.
La tarta se decora con mandarinas, ya sean frescas peladas y dispuestas en la parte superior o en almíbar escurridas y distribuidas sobre el relleno de queso.
Las mandarinas aportan un sabor fresco y cítrico a la tarta, lo que la hace refrescante y deliciosa. Si no tienes mandarinas, puedes completar la tarta con rodajas de kiwi, piña, melocotón, ciruelas… o una mezcla de distintas frutas.