Ana Obregón: sus palabras más demoledoras en su entrevista con Bertín Osborne
La actriz se ha sincerado sobre cómo afronta la muerte de su hijo, Álex Lequio, 20 meses más tarde: "Quiero salir sin ayuda, por mi trabajo interior"
Ana Obregón ha abierto su corazón a Bertín Osborne.
Ana Obregón ha recibido a Bertín Osborne en Marbella para abrir su corazón como nunca antes. Justo cuando se cumplen 20 meses del fallecimiento de su único hijo, la presentadora ha hablado sin filtros de su "guerrero de luz", al que recuerda todos los días, y ha relatado el infierno que vivió en su dura lucha contra el cáncer.
Álex Lequio siempre llevó una sonrisa en su rostro, a pesar de que tuvo que enfrentarse a una lucha muy dura. "Cuando pierdes un hijo no entiendes el infinito, lo sientes" ha dicho ella, que también ha recordado los siete meses que pasaron en Nueva York por el tratamiento de su hijo.
Ana Obregón, rota: "Creía que podía con todo"
A pesar de su dolor, ella ha querido señalar que "en una tragedia así las víctimas no somos los familiares. Los héroes y las víctimas son ellos, que son los que han luchado hasta el final. Mi hijo debería estar aquí, tenía 25 años".
Ana Obregón y Bertín Osborne son íntimos amigos desde hace casi 40 años.
Bertín ha tratado de consolar a su gran amiga, recordándole que "él no perdió ninguna batalla, él luchó hasta el final". Unas palabras que han conmovido a la actriz, que ha llegado a admitir que su mundo se paró cuando se fue su hijo.
"Creía que podía con todo, pero no puedes con todo" ha confesado, contando cómo fue el primer diagnóstico. Después de más de tres meses de pruebas, ella se encontraba en una comida de trabajo y él la llamó diciéndole que estaba fatal. "Fuimos a un hospital e hicimos pruebas. Llamé a su padre, vino, siempre ha estado ahí. Él deja todo y viene corriendo" ha remarcado.
El comentario más duro de Álex Lequio a Ana Obregón
Cuando le dijeron que su hijo tenía un tumor, su mundo se paró. "No sabía qué hacer" ha admitido. Aunque mantuvieron la esperanza ante la posibilidad de que fuera benigno, el resultado no fue positivo. Pero ella no dejó que su hijo viera el dolor que sintió en esos momentos.
"No voy a llorar y vamos a luchar contra esto" se dijo a sí misma, llegando a mandar a Alessandro Lequio a casa de su hermana para que no llorase delante del joven Álex.
"Llegué a Nueva York absolutamente convencida de que Álex se iba a curar" ha confesado la actriz. No le contó que se iban a Estados Unidos para el tratamiento ni a su familia, por lo que muchas personas cercanas se enteraron por la prensa. Fueron siete meses y más de 100 quimios.
En uno de esos momentos, Álex Lequio hizo un comentario que se quedó grabado en ella. "Mamá, perdóname por tener un hijo defectuoso" le dijo. A pesar de todo, siguieron luchando con todas sus fuerzas y su hijo siguió concienciando en sus redes sociales, donde mandaba todo su apoyo a otras personas que estaban pasando por lo mismo.
Pero el amor era recíproco, y tanto ella como Álex contaron con el enorme apoyo de sus seguidores. "Subimos una foto a las redes y llegó todo el cariño de la gente. Me conmovió tanto el cariño de tanta gente, ellos no saben cómo te acaricia el alma" ha dicho, muy emocionada.
La desgarradora confesión de Ana: "No he entrado en el duelo de mi madre"
"Si no hubiera tenido dinero, me hubiera hasta prostituido por salvar a mi hijo y llevármelo a Nueva York" ha confesado Ana, demostrando hasta qué punto puede llegar una madre por ayudar a su hijo.
En cuanto a cómo está superando su pérdida, ella admite que quiere seguir el ejemplo de Álex. "Me ha dado mi hijo una lección brutal de valentía, ¿cómo no voy a salir sin ayuda? Quiero salir sin ayuda, sin pastillas, por mi trabajo interior" ha confesado.
Ana Obregón cuenta cómo vivió la muerte de su hijo, Álex.
"Bertín, yo me perdono la vida todos los días" ha admitido. La presentadora también se ha sincerado sobre su regreso a la pequeña pantalla y ha dicho que su hijo la acompaña en todo momento. "Mi hijo me manda fuerzas" revela, después de admitir que su forma de lidiar con su muerte está siendo leer y estudiar la muerte.
El motivo, según ella, es que "hay que entender la vida, pero también la muerte". Ha sido entonces cuando Bertín le ha preguntado por el fallecimiento de su madre, que murió un año más tarde. "No he entrado en el duelo de mi madre, no hay sitio en mi cuerpo, hay demasiado dolor. No había pasado ni un año" ha confesado.
Sin duda, el fallecimiento de Álex Lequio ha marcado un antes y un después en la vida de la actriz, que sigue haciendo todo lo posible para superar su pérdida. Según ha revelado en sus redes sociales, todo su caché de esta entrevista estará destinado a la fundación que lleva el nombre de su hijo, con la que ayudará en la investigación contra el cáncer.