El arquitecto Joaquín Torres, novio de Raúl Prieto, se sincera sobre la dolorosa separación de su mujer
Joaquín se ha sincerado sobre lo mucho que se arrepiente de haber estado casado con una mujer antes de aceptar su homosexualidad
Joaquín Torres, en Telemadrid.
Pese a ser considerado el "arquitecto de los famosos", Joaquín Torres, el novio de Raúl Prieto, no ha tenido problemas en mostrar su lado más vulnerable.
En su intervención en el programa 'Enamorados de Madrid', que se emite en Telemadrid, Torres ha hablado sin pudor de lo mucho que le costó aceptar su homosexualidad, algo que hizo ya en la edad adulta, estando casado y con hijos.
Ahora, el arquitecto no oculta su relación con Raúl Prieto, director de programas de televisión de Mediaset, con quien incluso ha revelado que piensa casarse... pero el camino hasta llegar a este punto ha sido largo y no precisamente fácil.
"Cometí el error de casarme, de intentar un imposible. Generé muchísimo dolor", ha confesado Torres, que antes de salir del armario estuvo casado ocho años con la pintora Mercedes Rodríguez Parrizas, con quien tuvo dos hijos, Manuel y Álvaro, de 17 y 13 años respectivamente.
Joaquín Torres junto a su mujer, Mercedes.
Mientras sucede el duro relato del arquitecto, en el programa pueden verse varias imágenes como esta, junto a su mujer, y otras junto a sus hijos, que él mismo cedió al programa.
Pese a que dice que ahora, con su exmujer, su relación es buena, Joaquín se arrepiente profundamente de todo el dolor que le ha causado tanto a ella como a sus hijos, a quienes admira profundamente.
"Papá, yo lo único que quiero es que seas feliz", explica Joaquín que le dijo su hijo mayor cuando supo que su nueva pareja era un hombre.
Joaquín define a sus padres como "homófobos"
Si las palabras sobre su primer matrimonio son duras, las que el arquitecto le dedica a sus padres no son mucho más suaves. Joaquín Torres define a sus padres como "homófobos" porque "se han criado en eso".
"Me respetan y lo aceptan, pero prefieren no hablarlo", ha explicado, visiblemente dolido.
