Kiko Rivera habla sobre sus problemas de salud: "No sé ni cómo estoy vivo"
El cantante se ha sincerado sobre el ictus y el infarto que ha sufrido en los últimos años
Kiko Rivera asegura que está pagando ahora sus "excesos" de joven.
Kiko Rivera se ha sincerado como nunca sobre sus problemas de salud, llegando a confesar que "no sé ni cómo estoy vivo". En los últimos años, el cantante ha tenido varios sustos de salud, sobre los que no ha dudado en hablar en su última entrevista.
Kiko Rivera se ha llevado grandes sustos de salud
"Me he pegado dos sustos. En 2022, tuve un ictus, en 2023, angina de pecho, amago de infarto, y ese mismo año también me dio un infarto en la rodilla, que hoy vengo con dolores bastante jodidos, pero no me impide realizar mis compromisos", ha recordado en una entrevista con La verdad.
Y es que, según el Dj, esto que le ha ocurrido es por "los excesos de la vida de cuando uno es joven. Eso de 'cuando seas mayor te pasarán factura' es verdad y yo lo estoy sufriendo". Por eso, ha tomado la importante decisión de llevar una vida más saludable: "Ahora intento cuidarme lo máximo posible porque también tengo más trabajo que antes y tengo que estar no al cien por cien sino al mil por mil", ha explicado, mencionando la gran popularidad que ha tenido 'El Mambo', la misma que espera conseguir con su nuevo tema, 'El Malibú'.
Kiko Rivera ha confesado que "al final yo soy artista, pero también soy DJ y pincho a altas horas de la madrugada, normalmente siempre entre las 2 y las 3 de la mañana, casi nunca antes. Entonces, durante muchos años he llevado una vida muy, muy, mala y no sé ni cómo estoy aquí vivo".
Kiko Rivera, muy agradecido a su mujer y sus hijos
"A día de hoy puedo decir que gracias a mi mujer, sobre todo, y a la gente que ha estado conmigo en todo momento, pues me siento orgulloso de llevar otro estilo de vida mucho más sana", ha añadido el cantante, desvelando que para llegar a este punto ha necesitado ayuda profesional, pero que "mi mejor psicólogo han sido mi mujer y mis hijos". Para Kiko, Irene Rosales y sus tres hijos, Francisco, Ana y Carlota, son lo más importante.
De hecho, cuando sufrió el ictus, el hijo de Isabel Pantoja solo tenía en mente a los suyos: "Yo ahí lo único en lo que pensaba era en mis hijos y en mi mujer porque pensaba que me quedaba en el sitio. Fue un susto tremendo y yo ya no consumía. Solo pensaba: '¡Dios, no me puedo morir, tío! ¡Mis hijos!'. Ni la fama, ni la música, ni la popularidad. Solo mi familia, mi mujer y mis hijos".
Por suerte, casi un año y medio después de su mayor susto de salud, hoy en día está mucho mejor: "Pues gracias a Dios no me ha dejado ninguna secuela. También el médico me dijo que tuve la suerte de que entró y salió. Es como un pequeño aviso que te da la vida de 'tú sigue así porque como te equivoques otra vez te voy a joder y te voy a dejar en el sitio', pero no me ha dejado ninguna secuela", ha confesado.