Rauw Alejandro cierra su gira 'Cosa Nuestra' en Barcelona con un show de época y un guiño a Rosalía
El puertorriqueño hipnotizó al público con un show de casi tres horas, estética de los años 70, fuego, temazos y un emotivo guiño a Rosalía
Rauw Alejandro.
Tras arrasar la noche anterior en el Palau Sant Jordi, Rauw Alejandro volvió a conquistar Barcelona el 12 de julio con el último concierto de su gira 'Cosa Nuestra'. Y no fue un concierto cualquiera. El artista ofreció una auténtica superproducción de tres horas que desbordó energía, talento y emoción.
Desde que arrancó con ‘Punto 40’, uno de sus grandes himnos, el espectáculo fue una montaña rusa de sensaciones. Rauw no solo repasó sus mayores éxitos, también incluyó temas de su nuevo álbum, como ‘Mil Mujeres’ o ‘Tú con él’, conectando con un público entregado desde el primer minuto.
Un viaje a los años 70 con fuego, baile y pasión
La puesta en escena fue uno de los grandes aciertos del show: una ambientación inspirada en una historia de gánsteres del Nueva York de los años 70, que convirtió el escenario en un espectáculo visual constante.
Todo tenía un hilo narrativo que atrapaba al público, como si se tratara de una historia contada a través de la música y el baile. Las coreografías, perfectamente ejecutadas por un cuerpo de baile espectacular, y el vestuario de época completaron una experiencia sensorial única.
Rauw Alejandro y su guiño a Rosalía
Entre canción y canción, Rauw se fue soltando y conectando aún más con el público. En un momento, miró al Sant Jordi y soltó: “Yo viví aquí durante un tiempo… Me encanta esta ciudad”.
A pesar de haber anunciado su soltería delante de todo Madrid en uno de sus últimos conciertos, la frase no pasó desapercibida y todo el mundo lo pilló al vuelo: era un claro guiño a Rosalía, con quien vivió una etapa muy especial en Barcelona.
Con ese guiño incluido y una energía imparable durante todo el show, Rauw se despidió de su gira por todo lo alto. Barcelona le dio calor, él lo devolvió en forma de música, fuego y mucho baile. Un final redondo para un tour que ha dejado huella… y que anoche cerró con broche de oro.
