La mujer más anciana del mundo, Maria Branyas, cumple 117 años
La catalana, que es objeto de estudio debido a su longevidad, lo celebró en la intimidad

Maria Branyas.
“No le duele nada, ni tiene ninguna enfermedad”, asegura su hija, así que Maria Branyas pudo celebrar su 117º cumpleaños el 4 de marzo en la residencia de Olot (Girona) en la que vive.
En los últimos meses ha tenido un bajón

Maria Branyàs en 1925.
Lo hizo rodeada de los más íntimos, pues en los últimos meses ha tenido un bajón y no le benefician las visitas.

El día de su boda el 1931.
Maria se convirtió en la persona viva más anciana del mundo el 17 de enero del 2023, cuando falleció la monja francesa Lucile Randon, de 118 años.

Junto a sus nietos y su marido en el 76.
Además, en mayo entrará en el “TOP 10” de los supercentenarios de la historia al adelantar a otras dos mujeres que fallecieron con 117 y 27 días una y con 117 años y 66 días la otra.
Una vida tranquila y muy familiar

Maria Branyàs tocanto el piano con 87 años.
El día de su 117 cumpleaños, su familia compartió un bonito mensaje del misionero Pere Casaldàliga: "La vejez es una especie de sacramento. Pierdes oído, pero sientes más, porque escuchas la vida, no los ruidos... Ante la luz de la muerte, la vida adquiere un peso específico, más definitivo".

Maria con su perro, en casa.
Aunque es consciente de que es la persona más anciana del mundo, "le da igual, dice que no es ningún mérito suyo", asegura la menor de sus tres hijos, Rosa Moret.

María, recordando a sus seres queridos en la residencia.
María Branyas pasa sus días sentada en una butaca de la habitación de su residencia. Allí la visitan algunos de sus familiares y sus dos hijas, ya que su hijo, que habría cumplido 92 años, falleció.

Maria el día de su cumpleaños.
Esta catalana nacida en Estados Unidos, ha sobrevivido a dos pandemias (la gripe española y la covid), a la Guerra Civil, la posguerra y el franquismo.