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Este domingo en “Mi hija”: Demir vuelve a casa y le pide de nuevo matrimonio a Candan

Gracias a la ayuda de Cemal, Resat es encarcelado y la pesadilla para el padre de Öykü por fin termina

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Qué duro fue el último capítulo de “Mi hija” en el que los seres queridos de Demir lo despiden tres creer que ha muerto asesinado a manos de Resat... Por suerte el protagonista de la serie turca que tanto nos tiene enganchados cada domingo está vivo, aunque Resat lo tiene retenido y lo quiere utilizar para su interés.

Su primer encargo es llevar a cabo un robo de un valioso collar en una subasta. Allí Demir cuenta con la ayuda de Cemal, que ha sido el primero en saber que sigue vivo tras una pista que el padre de Öykü le dejó en el coche el día de su entierro.

Todo transcurre según lo planeado, hasta que el plan se tuerce y la sala de subastas queda cerrada a cal y canto hasta que el valioso collar aparezca. Es entonces cuando Cemal se lo quita a Demir y lo mete en su propio bolsillo, pues le prometió a Öykü que su padre volvería sano y salvo a casa.

Pero Cemal no piensa ir a la cárcel de nuevo: su plan es meter el collar en el bolsillo de Resat, que también está en la sala. Cuando llega la policía, el malvado es arrestado.

Demir regresa a casa y le promete a Öykü que jamás la dejará

Tras pasar por comisaría para hablar con el Comisario Hussein, Demir está loco por ir a casa. Cemal ya ha avisado por teléfono a Ugur y Candan de que Demir no está muerto y todos lo esperan con ansias, aunque la que más se sorprende es Öykü. La niña le regaña por haberse marchado lejos y no haberla llamado y le dice abrazándolo que no quiere que se vaya de nuevo. Demir le promete que jamás la dejará.

Con Demir de vuelta en casa, Candan y él ya no esconden su amor y pasan la noche acaramelados en el sofá.

Cuando Öykü se ha acostado, Candan y Ugur charlan en el sofá con él, y Cemal se da cuenta de que la pareja está muy acaramela, así que le dice a Ugur que se acueste y él se va de casa. Demir y Candan se quedan solos, abrazados, y así se duermen. “Tú eres mi hogar” le dice él a ella antes de besarla delicadamente.

A la mañana siguiente todos están pletóricos en casa, felices de estar todos juntos sanos y salvos. Demir lleva a Öykü al cole y Candan va a su clínica. Murat va a verla y de nuevo discuten, pues él recrimina lo mucho que Demir le ha hecho sufrir en vano, pues realmente estaba vivo.

Intenta convencerla de que su marido no le conviene, y le recuerda que él dio mucho dinero para que la liberaran cuando estaba secuestrada. Pero ella le deja claro que no lo quiere, que está enamorada de Demir. Murat se marcha enfadado, y le dice que se va a arrepentir.

Por fin en la casa de Ugur reina la felicidad, todos están sanos y salvos y unidos de nuevo para hacer frente a cualquier adversidad.

Demir, dispuesto a pedirle matrimonio a Candan oficialmente

Demir, por su parte, va a ver a su antiguo jefe, al que casi le da un infarto al verlo. Su puesto de camarero ya está ocupado. Cemal, por su parte, devuelve los favores que le había hecho Arif, así que se queda sin casa y sin coche. Cuando se reúne con los chicos, a todos se les ocurre un plan: que Demir le pida matrimonio a Candan oficialmente. Demir se lamenta de que no tiene nada que ofrecerle, ni dinero para un anillo.

A la salida del cole, Öykü les ayuda en su plan, y deciden montarle una cena romántica en casa.

Demir no tiene mucho que ofrecerle a Candan, pero animado por sus amigos y por Öykü le prepara una cena sorpresa para pedirle de nuevo matrimonio. Esta vez de verdad.

"Es un anillo que representa el camino de mi corazón a tu corazón"

La decoración es preciosa, Öykü y Ugur ejercen de camareros y Demir recibe a su chica con un ramo de flores. Ella se queda sorprendida y le encanta el detalle. “Todo es precioso, ¿por qué?”, pregunta ella, que no entiende nada.

Cuando están a solas, Demir le dice: “Candan, tengo que preguntarte una cosa. Por favor, no te rías”, entonces se arrodilla y le suelta: “¿Quieres casarte conmigo?”. Ella le dice riéndose que ya están casados, y él le contesta que quiere que sea un matrimonio real, no sólo un papel. Ella le responde ilusionada: “¡pues claro que quiero casarme contigo!”.

Él le ofrece una anillo de hilo, atado alrededor de su dedo, que, según le cuenta mientras Öykü se lo va chivando, “es un anillo que representa el camino de mi corazón a tu corazón. Representa todo el amor que siento y es una forma de que me recuerdes cuando lo veas. Desde este día hasta el fin de nuestros días prometo cuidarte y hacerte feliz como te mereces”, le dice en una escena súper romántica.

"¡Pues claro que quiero casarme contigo!", le responde Candan a Demir en una escena súper emotiva y romántica.

Al día siguiente, después de que Demir deje a la niña en el colegio, su teléfono suena: es su ex jefe diciéndole que un amigo suyo necesita ayuda en su restaurante y le dan trabajo de friega platos.

Candan, casi al mismo tiempo, recibe en la clínica una visita extraña, un hombre lleva a un cachorro de gato para que lo revise, pero al marcharse y sin que la joven lo vea, deja un medicamento en la estantería. Al salir llama a Murat diciéndole que el trabajo está hecho. Más tarde llegan unos Inspectores, encuentran el medicamento y le precintan la clínica a Candan. La amenaza de Murat se ha convertido en una malvada venganza.

Óykü vende pañueños para alquilar una casa en la que poder vivir todos

Por su parte, cuando Demir lleva ya casi toda la mañana fregando sin parar, recibe una llamada del cole: Óykü y sus mejores amigos no están, han desaparecido. Los tres están en la calle, donde han ido a vender pañuelos para ganar dinero, pues la niña está muy atormentada porque tras el incendio no tienen casa.

Demir deja su puesto de trabajo para ir a buscarlos y su jefe se enfada muchísimo. Mientras, los niños están perdidos, no encuentran el camino de vuelta a casa y rompen a llorar. Por suerte, Demir finalmente los encuentra.

Ya en casa, le echa una gran broca a la niña, pero ella le dice que todo lo hizo por ganar dinero para alquilar una casa en la que poder vivir todos. “Sólo quería ayudar, por eso lo hice”, le dice la pequeña desconsolada.

Demir le dice que arreglar la situación es su responsabilidad. ¿Cambiará por fin la situación de la familia y llegará un golpe de suerte que arregle su situación? ¡Ya estamos deseando que llegue el próximo domingo para descubrirlo!