Pimiento relleno de huevo con patatas
Una receta sencilla y deliciosa que combina la suavidad del huevo con el toque crujiente de las patatas y el dulzor del pimiento asado. ¡Un plato lleno de sabor y color para disfrutar en cualquier ocasión!
Pimiento relleno de huevo con patatas.
Los pimientos rellenos son un clásico en muchas cocinas del mundo, y esta versión con huevo y patatas es una alternativa perfecta para una comida equilibrada y reconfortante. El pimiento, al asarse, potencia su dulzura natural y se convierte en un recipiente perfecto para el relleno cremoso de huevo y queso. Además, la combinación con patatas le da un toque rústico y casero, recordando a los sabores tradicionales de la cocina de siempre.
- Ingredientes
- 2 pimientos rojos
- 1 pimiento verde
- 1 patata
- 4 huevos
- 4 cucharadas de queso rallado
- 1 ramita de perejil
- aceite de oliva
Tiempo Total45 minutos
Preparación10 minutos
Cocción35 minutos
Coste € € €
Dificultad
Primer plato Tipo de plato
No apta para veganos Intolerancia
4 Porciones
Receta de pimiento relleno de huevo con patatas paso a paso
Pasos
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01.
Precalienta el horno a 180 °C. Lava los pimientos rojos, córtalos por la mitad, a lo largo, y retírales las semillas y los filamentos blancos. Disponlos en la bandeja del horno, espolvoréalos con una pizca de sal y ásalos durante 20 minutos, hasta que estén un poco tiernos.
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02.
Mientras, prepara el relleno. Pela la patata y córtala en daditos. Limpia el pimiento verde y córtalo en trozos pequeños. Fríelos en una sartén con aceite hasta que estén dorados y escúrrelos sobre papel absorbente. Sálalos.
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03.
Rellena los pimientos asados con las patatas y el pimiento verde y casca un huevo en el centro de cada uno. Espolvorea con el queso rallado y hornea 15 minutos, o hasta que la yema empiece a cuajar. Sirve caliente, espolvoreado con perejil picado.
El truco de cocina de Pronto
Pimiento rojo
Las personas que atraviesan una situación de estrés físico o emocional o, todo lo contrario, se ven obligadas a guardar reposo absoluto, necesitan provisiones adicionales de vitamina C, el déficit de la cual produce fatiga y alteraciones en el ánimo. El pimiento rojo te ayudará a conseguir este propósito porque ocupa el puesto número uno en el pódium de las hortalizas más ricas en este nutriente. Si, además de estar baja de moral y desmotivada, estás cansada y más ojerosa y pálida de lo normal, ¿no será anemia? Si bien este ingrediente estrella de la dieta mediterránea no destaca por su aporte en hierro, gracias a su riqueza en vitamina C y en betacarotenos, multiplica la absorción del hierro presente en los cereales integrales, las verduras o el huevo.
Para que el huevo quede perfectamente cuajado sin resecarse, cubre los pimientos con papel de aluminio en la primera mitad del horneado y destápalos al final para que tomen un bonito color dorado.
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