Felipe, Letizia y Juan Carlos: las claves de su reconciliación
Los Reyes y sus antecesores asistieron a la misa conmemorativa por el hermano de la reina Sofía, que se celebró en el Reino Unido, y se mostraron de lo más cordiales entre sí
Juan Carlos salió de la misa por su cuñado, Constantino, del brazo de Felipe y ambos seguidos por Sofía y Letizia.
Los reyes Felipe y Letizia y sus predecesores, Juan Carlos y Sofía, han hecho pública una reconciliación familiar que se venía gestando desde hacía algún tiempo.
La misa en memoria de Constantino de Grecia, hermano de la Reina emérita, celebrada en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor en el Reino Unido el pasado 27 de febrero, sirvió como escenario propicio para la reaparición conjunta de los cuatro en buena sintonía, anticipando un posible regreso definitivo a España de Juan Carlos, una posibilidad que parece cada vez más cercana.
El rey emérito podría instalarse en Ginebra
Sofía, Juan Carlos y Elena, en una imagen de archivo.
De acuerdo con fuentes citadas por el programa "Así es la vida" de Telecinco, aunque la residencia oficial del padre del Rey continúa siendo en Abu Dabi, él está pasando cada vez más tiempo en Ginebra, Suiza, donde podría instalarse temporalmente antes de regresar a nuestro país.
A sólo dos horas y media en avión de Madrid –en comparación con las más de seis horas que hay desde los Emiratos– allí vive la infanta Cristina y fue el lugar elegido por Juan Carlos y sus hijas para celebrar la Navidad juntos.
Juan Carlos y Felipe.
Retomando el histórico momento de reconciliación pública de los Reyes, éste quedó inmortalizado en la fotografía del emérito saliendo del templo apoyado en el brazo de un diligente Felipe VI, seguidos por Sofía y Letizia.
Otras instantáneas capturaron a la actual Reina compartiendo bromas con su suegro o saludando con un beso a su suegra, dando a entender que, por amor a su esposo y a su hija, heredera al trono, ha dejado atrás desavenencias y busca recobrar la paz después de 18 años turbulentos para la Familia Real.
Felipe y Letizia charlando en una de sus recepciones.
A causa de todos los escándalos en los que se vio envuelta la familia real desde 2006, cuando estalló el caso Nóos, Felipe y Letizia se vieron obligados a establecer un sólido cordón de seguridad para proteger y brindar estabilidad a una Familia Real oficialmente reducida a cuatro miembros: ellos dos y sus hijas, Leonor y Sofía. Fue una decisión dolorosa y difícil para el Rey, quien, en aras del bienestar de la Corona, alejó a su padre.
Juan Carlos, en una de sus visitas a España.
Sin embargo, el periodista de investigación de "El Debate", Alejandro Entrambasaguas, asegura en su libro "Juan Carlos I, el Rey en el desierto" que este alejamiento fue principalmente para la galería, ya que el exmonarca y su hijo se han reunido en secreto al menos dos veces desde entonces, según otras fuentes, en un mínimo de cuatro encuentros.
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