Pronto
  1. Home
  2. Noticias del corazón
  3. Casas reales
  4. Familia real española

Jaime Peñafiel: Don Juan Carlos y su derecho a volver

Su presencia en nuestro país, tras pasar por Londres, ha desatado la polémica. Y me llama la atención, porque la Constitución defiende el derecho de los españoles a "elegir libremente su residencia"

Juan Carlos saluda desde su coche.

Juan Carlos saluda desde su coche.

Jaime Peñafiel
En esta sección, Peñafiel analiza cada semana a los personajes más fascinantes del mundo del corazón y cuenta historias y anécdotas, muchas de las cuales vivió en primera persona

En esta sección, Peñafiel analiza cada semana a los personajes más fascinantes del mundo del corazón y cuenta historias y anécdotas, muchas de las cuales vivió en primera persona.

Tenemos casi la misma edad, pero yo soy un poco mayor, aunque mi experiencia como periodista fue creciendo al mismo tiempo que lo hacía don Juan Carlos.

Le conozco, le admiro y le quiero desde hace ya no sé cuántos años. Siempre he reconocido, incluso públicamente, que las debilidades y los defectos de don Juan Carlos me alejaban del Rey en la medida en que me acercaban al hombre calculador, paciente, indiscreto, infiel, frívolo e ingrato, así como también héroe y buen gobernante.

Puede decirse que es lo único bueno que dejó Franco y que se mantuvo a lo largo de 38 años. Pero, como sabiamente afirma la tradición china: "El buen hombre es el maestro del malo y el mal hombre es la lección del bueno".

Don Juan Carlos siempre me distinguió con su afecto y con detalles que nunca olvidaré, empezando con su comportamiento con motivo de la muerte de Isabel, mi querida y única hija. No sólo me telefoneó emocionado el día que vio su esquela en el ‘ABC’, sino que envió al entonces jefe de la Casa del Rey, mi paisano Fernando Almansa, a la misa que en su memoria se ofició en la cripta de la iglesia de los Jesuitas de la madrileña calle de Serrano.

Juan Carlos y Jaime Peñafiel

Charlando con el emérito –al que conozco desde antes de que fuera proclamado Rey– durante uno de los viajes oficiales que cubrí como reportero.

El gran revuelo por esta visita

Hoy, como me ocurrió el año pasado, cuando el emérito también pasó unos días en Galicia provocando una gran agitación, me sorprende la ignorancia no sólo de la prensa sino de la propia Zarzuela sobre el artículo 19 de la Constitución. "Los españoles tienen derecho a elegir libremente su residencia y a circular por el territorio nacional. Asimismo, tienen derecho a entrar y salir libremente de España. Este derecho no podrá ser limitado por motivos políticos".

Más claro, imposible. ¿Por qué tiene que extrañar y sorprender que don Juan Carlos haya decidido regresar, desde su injusto exilio, a su país con el fin de pasar unos días? Nadie se lo puede impedir. Ni tampoco se puede prohibir que la prensa quiera dar testimonio de su presencia en Sanxenxo para competir con su embarcación "El Bribón" en las regatas que han tenido lugar en la localidad pontevedresa. Ni que el público se siga agolpando para verlo. ¿No lo hacen cuando aparece Tamara Falcó, por ejemplo? ¿O cuando lo hace Ana García Obregón? Y alguna diferencia, pienso, hay.

También me ha sorprendido que ni los eméritos, ni Juan Carlos ni doña Sofía, hayan sido invitados a los actos de coronación del rey Carlos III de Inglaterra, cuando sí lo fueron a los funerales de la reina Isabel II, el 19 de septiembre del 2022.

Juan Carlos con Carlos de Inglaterra

Aunque se especuló con un encuentro, Buckingham aclaró que no hubo almuerzo entre Carlos III y el emérito.

Pero, el pasado lunes 17 de este mes de abril, don Juan Carlos se trasladó, a bordo del avión privado de su amigo el jeque Mohamed bin Zayed, desde Abu Dabi a Londres, donde aquella misma noche se le vio cenando en Oswald’s, el club privado más distinguido de la ciudad, situado en el elegante distrito de Mayfair. Entre sus miembros y visitantes figuran la reina consorte Camilla, el príncipe Guillermo de Inglaterra, los exmandatarios británicos Boris Johnson y Liz Truss o la actriz Joan Collins.

Y, aunque se dijo que Carlos III del Reino Unido había invitado a su primo el rey (sí, el rey) Juan Carlos a un almuerzo privado en el palacio de Clarence House, al cierre de esta edición la Casa Real británica había informado de que ese encuentro nunca tuvo lugar.

Esa misma tarde, don Juan Carlos asistió al partido de fútbol entre el Real Madrid y el Chelsea, en el que ambos se jugaban el pase a las semifinales de la Champions League. Después, el padre de Felipe VI pernoctó en Londres y, al día siguiente, miércoles, emprendió su viaje a Vigo, como tenía previsto.

Juan Carlos en Inglaterra

Juan Carlos llega al estadio del Chelsea para ver el partido contra el Real Madrid.

Letizia se libra del reencuentro con su suegro

Y así están las cosas en estos momentos con respecto a la esperada coronación inglesa. Con muchas presiones de la Zarzuela sobre Buckingham y tiras y aflojas acerca de si los Reyes eméritos irán o no.

Lo que está claro es que con la ausencia del rey Juan Carlos en la ceremonia, que se celebrará en la abadía de Westminster, Letizia se libra del reencuentro con su suegro y Felipe también evita tener que verse con su padre.

Loading…