Guillermo y Kate Middleton, muy criticados por la fortuna que gastan en cambios de domicilio y reformas
El el Reino Unido está generando cierto malestar que Kate Middleton y el príncipe Guillermo se hayan mudado de palacio hasta en 3 ocasiones (haciendo millonarias reformas) en sus 14 años de matrimonio
Kate y Guillermo, en una imagen de sus redes sociales.
Desde siempre, la familia real inglesa ha tenido fama de ser una de las más derrochadoras... y también de las que más dinero acumulan (y generan).
Si, hace unos meses, se supo que Carlos III había duplicado el dinero que atesoró su madre, Isabel II, ahora tanto los medios como el pueblo británico están molestos por la fortuna que gastan Kate Middleton y el príncipe Guillermo en sus constantes cambios de domicilio.
La familia real británica: el príncipe Guillermo, Kate Middleton y sus hijos George, Louis y Charlotte.
Y es que, pese a ser con diferencia los miembros más queridos de su familia, hay algo que no termina de gustar a los ingleses: que en sus 14 años de matrimonio se hayan mudado (oficialmente) hasta 3 veces de casa, con los constantes gastos que esto genera para las arcas públicas.
De hecho, desde que conocimos que Kate y Guillermo se mudarían antes del final de 2025 a Forest Lodge, antes incluso de saber el feo detalle de que la pareja va a expulsar a los vecinos de las casas colindantes, el matrimonio está en el punto de mira.
Kate y Guillermo, muy criticados por sus constantes (y millonarios) cambios de casa
En 'Espejo público' hablan de la nueva mudanza de Kate y Guillermo.
De aquí a pocos meses, Kate Middleton y el Príncipe Guillermo van a cambiar su actual casa por Forest Lodge, una enorme mansión con 8 habitaciones, pistas de tenis, establo propio y hasta un estanque.
Un cambio cuya reforma, para que todo esté al gusto de la pareja, tendrá un coste de 2 millones de euros. Algo que todos pasarían por alto, de no ser porque no es, ni de lejos, la 1º vez que los Gales se gastan una fortuna en renovar su, como ya se refieren en tono jocoso en la prensa inglesa, "new forever home (nueva casa para siempre)".
Kate Middleton y el príncipe Guillermo.
Y es que, en sus 14 años de casados, los herederos a la corona han tenido 3 residencias oficiales (contando con la nueva, Forest Lodge), aunque han residido hasta en 5 palacios diferentes.
Todas las casas y palacios en los que han vivido Kate y Guillermo
El palacio de Kensington, en una imagen de redes sociales.
Cuando, al casarse, se mudaron al Apartamento 1A del Palacio de Kensington, los entonces jóvenes príncipes (sin hijos) acometieron una reforma de cinco millones de euros, para dejarlo a su gusto.
Pero, pese a tener esta lujosa residencia en el corazón de Londres, siempre se ha dicho que han pasado temporadas, de manera extraoficial, en Buckingham Palace.
Una imagen de Adelaide Cottage, la casa de Windsor en la que pasó su enfermedad la duquesa de Cambridge.
En 2022 llegó su primera mudanza a Adelaide Cottage, en los terrenos del Castillo de Windsor. Con este movimiento, cuya reforma costó 2 millones de euros, la pareja consiguió que sus hijos estuviesen más cerca de su lujoso colegio privado, Lambrook School, y pudieron estar más presentes en la última etapa de la vida de Isabel II.
Un año después les sobrevino la enfermedad de Kate, de la que hoy, por fortuna está curada. Entonces, la pareja quiso alejarse del ojo público, y Adelaide Cottage era el espacio perfecto para ello.
Los príncipes y sus hijos se trasladaron en varias ocasiones a Anmer Hall, Sandringham.
Pero esta no era su única residencia oficial, ya que también son propietarios de Anmer Hall, un increíble palacio en Sandringham (Norfolk) con el que la abuela del príncipe les obsequió cuando se casaron.
Por eso ahora ha molestado tanto que, teniendo tantos lujos a su alcance y, a la vez, tanto interés por aparentar ser una familia normal, de nuevo Kate y Guillermo hayan decidido trasladarse, y gastar otros dos millones en una nueva reforma.
Pese a que para ellos puede suponer una nueva vida tras la complicada época por la que han pasado, desde fuera es percibido como una imagen de inestabilidad para una familia real, generando la sensación de que la pareja no encuentra un "hogar definitivo".