Anne Igartiburu y Pablo Heras-Casado: así fue su historia de amor

Enamoradísimos. Así parecía que estaban Anne Igartiburu y Pablo Heras-Casado desde que se conocieron. Lo suyo fue un auténtico flechazo y por eso sorprendió tanto la noticia de su separación. Algo que la misma presentadora confirmaba poco después de que los medios se hicieran eco de la misma.

De momento, Anne se ha quedado en el que ha sido su hogar desde hace varios años, en la zona norte de Madrid, mientras que Pablo ha empezado su nueva vida de soltero en un piso en el centro de la capital, muy cerca del Teatro Real, donde es director invitado desde el 2014.

Al parecer, el matrimonio hace vida separada desde hace meses y, de hecho, este año, por primera vez desde que están juntos, el director granadino no la acompañó desde el otro lado de las cámaras en el programa de fin de año, que ella presentó con Ana Obregón. Sin duda, esa ausencia fue una clara señal de que algo estaba pasando en la vida del matrimonio.

Anne y Pablo, dando la bienvenida al 2020:

La chispa entre ambos saltó en una entrevista

Anne y Pablo se conocieron en el 2014, cuando la periodista entrevistó al director en un programa de radio. Apasionada como es de la música clásica y de la ópera –sus padres le regalaron su primer disco, un concierto del compositor Haydn, cuando tenía un añito–, quedó fascinada por la personalidad del granadino, que también sintió la punzada de una de las flechas de Cupido en cuanto ella le hizo la primera pregunta.

Y así empezó su discretísima historia de amor, que decidieron formalizar en noviembre del 2015, cuando contrajeron matrimonio en secreto, en la localidad vizcaína de Elorrio, en una ceremonia a la que sólo asistieron los contrayentes y un par de testigos.

Así celebraron ambos San Valentín hace solamente un año:

Anne estuvo casada anteriormente con el bailarín Igor Yebra

Mientras que para Pablo aquel era su primer matrimonio, para ella fue su segunda boda, pues en el 2004 le dio el "sí, quiero" a otro hombre vinculado al mundo de la música clásica, el bailarín Igor Yebra, de quien se separó dos años después.

La relación de Anne y Pablo entró en una etapa llena de felicidad que culminó con la llegada de su hijo, Nicolás, nacido en junio del 2016, cuando Anne tenía 47 años. El bebé fue su primer hijo biológico, ya que entonces era madre de Noa, que nació en el 2001 y a la que adoptó en la India, y Carmen, una niña vietnamita, también adoptada, que llegó a su vida en el 2013.

Ahora, Anne y Pablo han decidido separarse, poniendo fin a lo que la presentadora definió una vez como una “preciosa historia de amor”. Y lo han hecho con la determinación de seguir llevándose tan bien como siempre, no sólo por el amor que se han profesado y que ahora se ha transformado en una maravillosa amistad, sino también por su hijo, Nicolás, y por las dos niñas, Noa y Carmen, con quienes siguen formando una gran familia.