Arantxa Sánchez Vicario hace las paces con su familia
La extenista apareció en los Premios María de Villota junto a su madre y sus tres hermanos, sus grandes apoyos
Arantxa Sánchez Vicario, de 51 años, está muy feliz de haber retomado la relación con su familia.
Tras años enfrentados, los Sánchez Vicario vuelven a ser una piña. Así lo demostraron en una entrega de premios a la que asistieron juntos la matriarca del clan y los cuatro hermanos: Marisa, Emilio, Javier y Arantxa.
Al recoger el galardón Ciudad de la Raqueta que distinguía a su familia, Emilio tuvo unas cariñosas palabras para la benjamina que aludían a la reciente situación personal de ésta. "Arantxa ha luchado por sus hijos en esta etapa el doble o el triple de lo que ha luchado cuando ganó sus grandes torneos. Está demostrando que la familia y ser madre es el partido más importante", afirmó.
La extenista junto a su madre y sus tres hermanos, Javier, Marisa y Emilio.
No quiso hacer declaraciones sobre su reciente juicio
Después de vivir un infierno estas últimas semanas cuando declaraba ante el juez por el presunto delito de alzamiento de bienes por el que la Fiscalía pedía para ella y Josep Santacana una pena de 4 años de cárcel y una multa superior a los 6 millones de euros, Arantxa Sánchez reapareció ante las cámaras acompañada de su familia, más unida que nunca.
Una estampa familiar que no veíamos desde hace años, sobre todo debido a los malos entendidos y los enfrentamientos públicos que tuvo con todos ellos en el pasado.
Muy unidos, todos han posado abrazados y sonrientes ante los medios de comunicación que cubrían la noticia. Eso sí, tras hacerse unas fotografías, Arantxa huía de las cámaras para evitar hacer declaraciones sobre la delicada situación que ha vivido estos últimas semanas.
La extenista confirmaba que están "muy contentos de poder estar todos juntos" y aprovechaba para dar las "gracias por este premio", al igual que su hermano Emilio, que agradecía a la prensa su interés: "Gracias a todos por venir, un abrazo".
