Bertín Osborne revela el motivo por el que acabó en la cárcel dos veces
El presentador, que reaccionó sin pensárselo a una injusticia que vio en una cámara oculta, le dio un tirón de orejas a Toñi Moreno porque ya se vio en una situación similar
Bertín Osborne ha recordado una inesperada anécdota sobre su paso por la cárcel.
Bertín Osborne ha dado una entrevista en 'Déjate Querer' con la que ha mostrado su lado más real y, para muchos, desconocido. El invitado de Paz Padilla lleva años siendo considerado un galán y un "seductor", pero él no se siente identificado con esa etiqueta. "Soy más bruto que un arao" ha bromeado.
Aunque admite que no es de lágrima fácil y no suele mostrar este lado personal, al hablar sobre su madre o sobre su hijo Kike, que padece una lesión cerebral, se emociona muchísimo. Además, ha confesado que otra cosa que le afecta mucho son las injusticias.
Una de las cosas que más le llamó la atención a Paz Padilla sobre Bertín fue la cámara oculta que le preparó Toñi Moreno hace unos meses. En ella, el presentador y cantante vio a un hombre acosando a una mujer y no se lo pensó ni un momento: actuó por instinto y por poco no se enfrenta físicamente a él. De hecho, ha sorprendido al contar que le advirtió a Toñi Moreno que bajasen el nivel, ya que si se hubiese metido en problemas, no sería la primera vez.
Bertín Osborne habla sobre su paso "por chirona"
"Me he buscado problemas, yo he estado en chirona dos veces" ha confesado, sorprendiendo a los espectadores y a la propia Paz. También ha recordado con humor que "estuve en el Puerto de Santa María por una bronca de estas, por un lío en el que me metieron. Estaba en una celda con otras cuatro personas y les preguntaba qué habían hecho".
"Uno me decía 'pues yo me he peleado', y otro me decía 'pues yo he atracado en varios chalets', y yo le preguntaba que dónde y me decía 'allí en Vista Hermosa' y yo le decía 'me cago en la leche, allí vivo yo'" ha dicho, entre risas.
Bertín Osborne en 'Déjate Querer'.
El presentador también ha recordado entre risas que vivió una situación muy divertida por este mismo motivo. "Yo estaba conociendo a mi primera mujer, Sandra, en un bar a los meses de salir de la cárcel cuando veo por el paseo acercarse cuatro quinquis con malas pintas" ha revelado, explicando que "mi mujer le vio y me dijo 'ten cuidado con ese', yo cuando le vi me acerqué y le pegué un abrazo. Al volver me preguntó que de qué le conocía. 'Amigo mío de la cárcel', le dije. Me miró muy malamente"
