Jorge Javier Vázquez: su sorprendente cambio físico a lo largo de los años
El presentador ha dejado boquiabiertos a los espectadores tras su radical transformación estética. Jorge Javier ha vuelto a la televisión con nuevo rostro... ¡y mucho sentido del humor!
 
            Dos meses de vacaciones dan para mucho, pero, en el caso de Jorge Javier, casi 60 días de ausencia televisiva le han cundido muchísimo: ha experimentado una transformación física inesperada y radical que, en su reaparición en la pequeña pantalla, ha dejado al personal a medio camino entre la estupefacción, la crítica y la risa.
¿Es este nuestro Jorge Javier de siempre o nos lo han cambiado? Es lo que los seguidores de 'Supervivientes All Stars' debieron de pensar cuando, en el arranque de la 2ª edición del "reality" extremo de Telecinco, vieron aparecer en el plató a un tipo que recordaba al presentador de Badalona, pero pasado por la máquina del tiempo con resultado incierto. ¿Qué había sucedido?
Su imagen eclipsó a los concursantes
 
            Tan simple como que Vázquez, a su vuelta de sus vacaciones en Tailandia, se sometió a una remodelación facial total. De nuevo ante las cámaras y pertrechado tras unas gafas ahumadas de aviador para disimular las últimas hinchazones de su tratamiento estético, el presentador estrella de Mediaset consiguió eclipsar a los mismísimos protagonistas del programa.
Esa noche, los espectadores no echaron en falta los tradicionales saltos desde el helicóptero con los que los 14 náufragos llegaban a la isla porque la imagen de Jorge fue la atracción hipnótica del show.
Impactó su nuevo rostro y también su figura embutida en un traje blanco total. Así vestido, quería homenajear al desaparecido Giorgio Armani, pero, según él diría con un chascarrillo, "me salió una mezcla de George Michael, Lamine Yamal y un poquito de Abraham Mateo".
 
            Minutos después de que España conociera la nueva imagen de Jorge Javier, los memes inundaban las redes con comparaciones hilarantes, de las que el primero en reírse ha sido él.
"He vuelto a dar la nota en mi reaparición", escribió en X al día siguiente desde su casa, con el rostro oculto por una mascarilla, gafas de sol y sombrero. "Después de tantísimos años, a ver qué me invento ahora para ‘El Diario de Jorge’", bromeó sobre su otro gran retorno televisivo. Y sentenciaba en un vídeo de Instagram: "Anda, que lo que hago por vosotros no tiene precio". Y, como lo prometido es deuda, en el plató de su espacio vespertino, vestido con camisa fucsia y ya sin las gafas de camuflaje, saludó a sus invitados diciendo: "Hola, soy Jorge Javier, aunque no lo parezca". Genio y figura.
Muchos comentarios
 
            El presentador en el primer programa de la nueva temporada de 'El diario de Jorge'.
Aunque el tsunami de críticas tras convertirse en otro ha sido bestial y hubiera tumbado a cualquiera, Jorge Javier no solo se ríe de esos comentarios, sino que reconoce abiertamente que le encanta pasar por los especialistas remodeladores.
"A mí es que me dicen de hacerme una operación de estética y me dan una alegría que ‘pa qué’, porque pensar en la anestesia y ponerme cachondo es todo uno", dijo una vez. Vaya, que el resultado, por mucho que a otros les chirríe, a él le encanta.
Un cambio que cuesta unos 15.000 euros
 
            Tras las críticas que recibió por su cambio radical, Jorge colgó esta divertida foto.
Según especialistas en estas intervenciones, la "full face" que se ha hecho Vázquez para restar algunos de los 55 años que cumplió el 25 de julio incluiría lífting para tensar la piel; una otoplastia para corregir las orejas; una rinoplastia para modificar la nariz; infiltraciones con el fin de tener una mandíbula más marcada y masculina; inyecciones de bótox en frente, entrecejo y patas de gallo y una blefaroplastia, que elimina la grasa y el exceso de piel de los párpados superiores e inferiores. Una operación de chapa y pintura que podría haberle costado unos 15.000 euros. Pecata minuta para la estrella con más tirón de la cadena amiga.
El impactante cambio físico de Jorge Javier Vázquez a lo largo de los años
 
            Desde que empezó en la tele en 1997 hasta ahora, el presentador catalán ha experimentado muchas transformaciones.
En los casi 30 años que lleva en televisión, Jorge Javier ha sufrido un sinfín de transformaciones y poco queda de aquel cándido y divertido redactor de nuestra revista Pronto que, en 1997, dejó la prensa escrita por los estudios televisivos. Empezó como colaborador de Ana Rosa Quintana y Rosa Villacastín en 'Extra Rosa' para después colarse en millones de hogares con programas como 'Aquí hay tomate', 'Sálvame' o 'Supervivientes'.
 
            2007
En sus inicios lucía un "look" clásico con americana, camisa blanca y corbata, corte de pelo que dejaba al descubierto una frente con entradas profundas y unas gafas de montura ligera.
 
            2009
Podría haber prescindido de ellas cuando se operó la vista, pero decidió conservarlas como parte de su imagen, aunque las lleva ahora sin cristales.
 
            2013
 
            2016
 
            2017
 
            2019
El pelo es otro de sus detalles volubles: suele llevarlo muy corto, modificando el color desde su moreno natural al blanco platino pasando por varios tonos de rubio y colores flúor.
 
            2023
 
            2025
 
            Los cambios de peso han sido una constante a lo largo de estas tres décadas. Con tendencia a acumular kilos en épocas en las que abusó de la buena mesa y el alcohol, Jorge se ha sometido periódicamente a dietas draconianas, sesiones de gimnasio y liposucciones para reducir volumen en el abdomen. En una ocasión, llegó a perder 15 kilos en poquísimos meses.
 
            Con la barba (sin ella, cerrada o a lo Don Johnson en 'Miami Vice') también ha jugado y en 2019 se inyectó bótox en mandíbula y frente. Luego, usó ácido hialurónico de alta reticulación para redefinir mandíbula y barbilla y también "en el glande y me ha quedado precioso, muy juvenil". ¿Una broma?
Pelo, barba y retoques de especialistas
 
            En los siguientes años se cambió labios, cuello y nariz, se estiró la piel del rostro y afinó los párpados. Solo permanecen inalterables sus pobladas cejas. "Tengo la cara como una luna llena… los ojos como si me hubiera pillado Rocky", dijo entonces y queda ya claro que este punto narcisista será proporcional al tiempo: a más años, más retoques.
 
        