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Pablo Alborán, de 32 años, necesitaba desconectar para volver a reencontrarse. 

A.L

El aventurero Jesús Calleja es capaz de hacer hablar de sus sentimientos a famosos bastante reacios a hacerlo públicamente. Así volvió a demostrarlo una vez más durante su viaje con Pablo Alborán a Uganda, donde el artista le hizo confesiones muy íntimas. 

El cantante no pudo evitar emocionarse cuando cantó con el grupo Ndote Cultural Troupe. "Esto era necesario para mí", le aseguró Pablo a Jesús, antes de revelarle el estado anímico en el que se encontraba antes.

"Estaba en una especie de segunda crisis, pero esta vez no puedo parar, y venir me ha obligado, por lo que ha sido un regalo del cielo porque la música es esto. Me siento el hombre más afortunado del mundo aquí", dijo entre lágrimas. 

Para Pablo Alborán, la experiencia junto a Calleja ha sido una de las "más emotivas e inspiradoras que he vivido nunca":

Eternamente agradecido a Jesús Calleja

Basta con ver pequeños fragmentos de la aventura que vivieron el leonés y el cantante para comprobar lo bien que lo pasaron. Algo que, metido de lleno en la vorágine de sus numerosos proyectos, Alborán hacía tiempo que no vivía. 

"A veces se te olvida la verdadera razón por la que realmente estás haciendo música debido al ritmo en el que uno se mete", sentenció.