La preciosa relación entre Belén Esteban y su hija Andrea

Desde su nacimiento, el 20 de julio de 1999, Andrea Janeiro es el motor de la vida de su madre, Belén Esteban. La colaboradora ha demostrado de todas las maneras posibles que lleva toda la vida trabajando para darle a su hija las mejores oportunidades, y esta las ha sabido aprovechar a la perfección. Pese a que ambas tienen maneras muy diferentes de ver la vida (la joven no quiere saltar a la esfera pública y su madre es uno de los personajes más populares del papel couché), madre e hija se complementan a la perfección ¡y tienen una relación envidiable!

Poco queda decir de la faceta como madre de la colaboradora que no se haya dicho ya: desde el costumbrismo más entrañable como aquel "Andrea, cómete el pollo", a frases que pasaron al imaginario colectivo como "ni que fuera yo Bin Laden", a cuando se rumoreó que el defensor del menor se interpondría entre ambas (cosa que, finalmente, no sucedió)... Belén Esteban y Andrea Janeiro han estado juntas contra viento y marea y, ahora que la hija mayor de Jesulín de Ubrique es toda una mujer, esa relación maternofilial se ha transformado en una preciosa amistad. 

Belén Esteban nunca se ha quedado callada ante las injusticias

Si hay algo que siempre ha caracterizado a la de 'Sálvame', es que no se ha achantado ante lo que ha considerado injusto en cada momento... sobre todo, si el tema hace referencia a su hija. Belén no ha dudado en exponer públicamente las veces que ella ha notado que a Andrea no le han dado su sitio, especialmente entre los miembros de su familia paterna. La de San Blas ha sido, durante 20 años, la espina en el costado de Ambiciones, reclamando para su hija todo lo que, por ley, le corresponde, nada más. 

Una de las últimas y más sonadas ocasiones tuvo lugar hace solo unas semanas: Julia Janeiro, hija de Jesulín y María José Campanario y hermana pequeña de Andrea, se sometió a una operación de cirugía estética, y la televisiva le hizo un reproche en directo al padre de su hija: "Lo que me joroba es que a una se le paguen las tetas y a la otra no se le pague ni la mitad de la carrera. Aquí sí que se ven hijos de segunda", clamó. 

Respetando la decisión de Andrea Janeiro de mantenerse en el anonimato

En 2017, Andrea Janeiro cumplía 18 años y su madre le organizó una gran fiesta en un popular local madrileño. La joven aparecía junto a ella, muy sonriente y visiblemente nerviosa, y los medios se agolpaban para conseguir la primera foto de la hija de Belén Esteban que podría mostrarse íntegra, sin pixelar. 

Entonces, no sabíamos que esa iba a ser la única vez que veríamos a Andrea posar en un photocall... ella siempre ha querido mantenerse en un discreto segundo plano y no convertirse en un personaje famoso, a diferencia de su madre. Hoy, a sus 22 años, Andrea se ha licenciado en la Universidad (ha estudiado Comunicación Audiovisual) y está empezando a fraguar su carrera profesional. Su madre es la primera que ha respetado el deseo de su hija de permanecer en el anonimato, incluso evitando ella misma hacer declaraciones, y diciendo en directo frases tipo "y no puedo hablar más, que después me regañan en casa". 

Andrea, de 22 años, siempre será la niña de sus ojos

Gracias a su holgada posición económica, como ya desveló en La Resistencia, Belén Esteban ha podido proveer a su hija de algo que, tristemente, muchos jóvenes tienen hoy día grandes dificultades para obtener: su propio piso. Y es que, de cara a su futura independencia económica, la de San Blas ha querido facilitarle las cosas a su pequeña comprándole un apartamento en Madrid. 

Al parecer, todo viene porque se hizo público que Jesulín le había comprado a Julia un piso en la localidad madrileña de Getafe, de nuevo un trato de favor que recriminó Belén: "Es lógico que si a una le das un piso y también tienes otra, que a la otra le des otro. Y si no lo digo, reviento", estalló en 'Sálvame' después de que Diego Arrabal sacara a la luz la información. 

Esta es solo una muestra más de que, a la mínima ocasión, Belén Esteban saca las garras por su hija, y por suerte, puede ella sola, con su trabajo en televisión y su marca, Sabores de la Esteban, mantener a su hija hasta que esta pueda valerse (económicamente) por sí misma. Mientras tanto, Andrea siempre será su niña...