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Roberto Leal se lo pasa bomba con su perrita Pepa.

S.C.P.

Roberto Leal está pasando una cuarentena de lo más familiar y muy bien acompañado de su pareja, Sara Rubio, su hija Lola y la pequeña Pepa. Pero es que, además, se encuentra en su mejor momento profesional. En plena pandemia mundial, el presentador ha logrado lo que ningún otro ha podido hacer en la televisión española: presentar dos programas de éxito a la vez en dos cadenas diferentes.

Mientras que cada tarde, antes de las noticias, Leal conduce Pasapalabra, el programa estrella de Atresmedia, una hora más tarde hace lo mismo para la competencia, poniéndose al frente de Operación Triunfo 2020, que ha vuelto a La 1 después de hacer un parón por la crisis del coronavirus.

 

La pullita de Noemí en OT 2020

El hecho de que Roberto esté trabajando para otra cadena no ha pasado desapercibido para Noemí Galera que, en su reencuentro virtual durante el programa, no dudó en lanzarle una pullita a su compañero.

“Yo es que cuando oigo ‘Ukelele’ digo ¡Pasapalabra!”, bromeó la directora de la academia. Por supuesto, Leal no pudo evitar reírse: “Si es que mi Noe… Está en tó’”.  

 

 

Está claro que, aunque Roberto se haya pasado a la competencia, el buen rollo entre ambos sigue estando presente. Y no nos extraña, ya que el presentador, a pesar de tener mucho trabajo, lo da todo en cada programa. Una muestra de ello fue la maravillosa intervención que hizo en la actuación de Nia, cuando salió al escenario y se puso a bailar como uno más del show.

 

 

Roberto y Pepa, la pareja más divertida

Como hemos ido viendo durante las últimas semanas, Roberto Leal es un hombre muy familiar y, durante esta cuarentena, ha aprovechado cada ratito en casa para pasar tiempo con su pareja, su hija y su perrita.

Incluso, se ha aficionado a grabar divertidísimos vídeos con ellas pero, sin duda, es su chihuahua Pepa la que se ha convertido en la estrella de sus redes sociales.

En la última publicación en la que aparece la perrita, el presentador intenta atraparla y ella sale corriendo despavorida. ¿La razón? ¡No quiere bañarse!

Después de una tronchante persecución, finalmente Roberto da con ella y la mete bajo el agua, desde donde Pepa le mira con cara triste. ¡Qué tierna! Eso sí, después de ducharse y secarse, la perrita está de maravilla.

 

 

¡No te pierdas sus mejores vídeos con Pepa!